Bajo nivel futbolístico entre los finalistas, coinciden expertos

Brasil-Alemania, favoritos en este pobre Mundial

Corea sólo muestra buen estado físico y arbitraje localista; Turquía, espíritu de lucha y disciplina

DPA, REUTERS Y AFP

Osaka, 23 de junio. Francia, Brasil, Croacia y Holanda, por un lado, los mismos brasileños, Alemania, Turquía y Corea del Sur, por el otro; casi todos los expertos coinciden en que los semifinalistas de este Mundial comparados con los de Francia 98 reflejan la pobreza en el nivel futbolístico.

"Tristemente esta Copa ha presentado a varios equipos que responden a instrucciones como la de Brasil, con un futbol demasiado pragmático, dependiente del contrataque, y temo que si ganan el Mundial este juego perderá.

"No han puesto énfasis en la técnica, sino en la industria física. Esto es futbol y se supone que debe proporcionar entretenimiento", señaló Johann Cruyff.

Coincidió César Luis Menotti: "El músculo ocupa un lugar más valioso que el talento. La calidad del juego es pobre. Los cuatro semifinalistas no son los mejores".

En la misma línea se ubicó Michel Platini: "Veo muy poco buen futbol. Hoy se ganan a menudo los partidos simplemente corriendo más que el contrario".

De los cuatro equipos que pelearán por el título sólo Brasil es capaz de deleitar a los espectadores con talento y habilidad, tal como demostraron los goles de Rivaldo, Ronaldo y Ronaldinho Gaúcho ante Bélgica e Inglaterra.

A pesar de que Luiz Felipe Scolari es un entrenador "tacticista", la magia de sus pupilos reivindica el sentido estético del juego.

No se puede decir lo mismo de los restantes semifinalistas. Corea del Sur sacó ventaja de su impecable estado físico y de algunos arbitrajes localistas.

Alemania, muy limitada

Alemania es un equipo muy limitado que depende de la fortuna de un centro para el cabezazo de Miroslav Klose o de Michael Ballack; y Turquía no presenta más credenciales que su espíritu de lucha y disciplina.

En 98 los equipos semifinalistas levantaban otras banderas. El anfitrión tenía en Zinedine Zidane a un exponente del balompié exquisito, rodeado de lugartenientes con el arco entre ceja y ceja.

Brasil ofrecía lo que su historia mandaba. Holanda con Bergkamp y los hermanos De Boer, y Croacia con Suker, Boban y Prosinecki deleitaron en muchos partidos.

El argentino Pablo Aimar teme que disminuya la calidad del espectáculo. "Pobre futbol si los equipos que sólo se preocupan por defender terminan siendo los más exitosos".

"Añoramos el pase genial, el regate habilidoso, el disparo artístico. Muy raramente surge algo de eso en este Mundial", dijo el entrenador alemán Christoph Daum.

Más allá de las críticas, Alemania y Brasil son favoritos para llegar a una final inédita, ya que sus rivales parecen simples invitados que difícilmente podrían oponerse a dos equipos que suman siete títulos mundiales.