Para el astro brasileño los sudamericanos abrieron el camino para que los turcos avanzaran

Turquía, en deuda con Brasil: Rivaldo

Ronaldo se encuentra en reposo para superar una lesión leve en el muslo izquierdo

DPA, AFP Y REUTERS

Saitama, Japon, 23 de junio. El astro brasileño Rivaldo sostuvo que Turquía debería estar agradecida y no enojada con su equipo, pese a que los sudamericanos ganaron de forma polémica el partido que ambas escuadras sostuvieron en la primera ronda del Mundial.

Rivaldo, quien fue el principal protagonista de las dos grandes polémicas que rodearon el triunfo de Brasil por 2-1, sostuvo que fue la verdeamarelha la que ayudó a los turcos a clasificarse a octavos, como segundos en el grupo C.

"Creo más bien que los turcos estarán felices con nosotros. Si hubiésemos empatado con Costa Rica, ellos no habrían llegado hasta aquí", dijo el jugador, aludiendo al último partido de la primera fase, en el que la goleada brasileña por 5-2 sobre los ticos le permitió a Turquía clasificar por diferencia de goles.

En el choque de apertura para ambos, Rivaldo anotó el penal que equivocadamente marcó el árbitro Kim Young y además fingió un balonazo en la cara, con lo que Unsal fue expulsado. "ƑLa simulación?, ya se me había olvidado", dijo Rivaldo.

Los brasileños recibieron la buena noticia de que Ronaldinho Gaúcho sólo fue suspendido un juego, luego de su expulsión ante Inglaterra, por lo que estaría listo para la final. "Eso era lo que esperaba. Tengo la esperanza de jugar la final, aunque mis compañeros deben respetar mucho a Turquía para avanzar", advirtió.

Ronaldo, cansado

A su vez, Ronaldo trata de superar la lesión en su muslo izquierdo para participar el miércoles. "Soy optimista de que estará listo", dijo el médico José Luiz Runco.

"Me pasé dos años sin jugar y ahora he jugado muchos partidos en un corto periodo, por lo que estoy más cansado que los otros, pero me estoy recuperando y en unos días estaré mejor", dijo el llamado Fenómeno.

Esta temporada, Ronaldo participó en pocos partidos con el Milán y el encuentro contra Yugoslavia, en marzo, fue su primero desde octubre de 1999.

En tanto, Roberto Carlos consideró que esta semifinal será más difícil que el último encuentro. "En una final uno juega concentrado y con conciencia de la responsabilidad. Pero en una semifinal uno tiene que ganar para ir a la final y eso hace que el margen de error sea mínimo o inexistente", señaló, pero aseguró que "en este momento tenemos mucha autoconfianza y sabemos que somos capaces de derrotar a todos los que están clasificados."

Pese a ser la única selección que ha ganado todos sus partidos y el único de los semifinalistas que ha marcado por lo menos dos goles en cada encuentro, los brasileños siguieron rechazando la condición de favoritos. "Los turcos están fortalecidos, han evolucionado en el torneo y ahora están más confiados y fuertes", apuntó Juninho.