El caso no está en la mesa de la reforma del Estado: Gordillo

Prepara el tricolor documentos sobre el Pemexgate que entregará al IFE

ENRIQUE MENDEZ Y RENATO DAVALOS

Funcionarios de la Secretaría de Finanzas y de la Coordinación Jurídica del CEN del PRI se reunieron ayer para determinar qué información le entregarán al Instituto Federal Electoral sobre el desvío de mil 480 millones de pesos de Pemex a la campaña de Francisco Labastida Ochoa.

Al respecto, la secretaria general priísta, Elba Esther Gordillo, declaró por la tarde que el PRI no ha solicitado en ningún momento que el Pemexgate esté en la mesa de negociaciones de la reforma del Estado. ''Pedimos respeto al estado de derecho y no pretendemos defender la impunidad; esperamos que en todos los casos se aplique la ley. Pero, desde luego, las especulaciones y filtraciones afectan''.

Mientras, el IFE ha solicitado al tricolor precisar detalles sobre el primer sorteo milenio millonario, que habría sido utilizado para lavar parte del dinero que el partido recibió de Petróleos Mexicanos vía el sindicato petrolero. La dirigencia priísta debió responder la semana anterior. El representante suplente del partido ante el IFE, Ra-fael Ortiz Ruiz, participó ayer en un encuentro con el secretario de Finanzas, Rigoberto Quintero, y el subcoordinador Jurídico de la dirigencia priísta, Enrique Pérez, y posteriormente se reunió con el titular del área jurídica, Miguel Angel Yunes.

Al término del balance en Finanzas -área en la que la Fiscalía Especializada en Atención a Delitos Electorales ha centrado sus diligencias en el tricolor-, Ortiz insistió en la posición oficial de que el partido no manejó recursos ilegales y que por esa razón puso a disposición del IFE todos sus archivos.

En tanto, la ex presidenta del PRI, Dulce María Sauri, refirió que toda la documentación del partido ha estado siempre a disposición de los auditores del instituto electoral, por lo que ''ya la conocen''.

La senadora priísta recordó que ella entregó, antes de la elección interna, los libros blancos con toda la documentación sobre el partido, incluida la de los ingresos y egresos del Revolucionario Institucional. No descartó que esos documentos pudieran ser utilizados para atacar a las dirigencias anteriores a la de Roberto Madrazo Pintado.

''Cuando hay una intención dolosa, siempre hay manera de encontrar cómo hacerle, si el afán es de confrontar y confundir. Sería lamentable que se abone a un terreno que no producirá más que un fruto de ira y de enfrentamiento. Frutos amargos'', sostuvo.

También acusó al presidente Vicente Fox de enfocar exclusivamente la investigación sobre el manejo irregular de recursos en las campañas presidenciales de 2000, a las actividades del PRI. ''El gobierno trata de contar con un circo, no de una sino de varias pistas, e ilumina sólo una: la de Pemex, y lo hace cuando requiere desviar la atención de cuestiones molestas, como la investigación sobre el financiamiento irregular de Amigos de Fox''.

Y atribuyó al gobierno foxista la filtración de documentos que relacionan a los senadores Manuel Bartlett y Humberto Roque, y a la diputada Beatriz Paredes Rangel, como destinatarios de parte de los recursos que el PRI recibió del sindicato petrolero en ese año. Según Sauri, ello constituye una ''estrategia de carambola'' del Poder Ejecutivo, pues al mismo tiempo que golpea a los priístas, también ataca al Congreso de la Unión, ''en otra pista de atribuirle al Legislativo las deficiencias propias''.

Por su parte, Gordillo, entrevistada en un foro en el que coincidió con Luis Felipe Bravo y con Rosario Robles, dijo que el PRI no pretende negociar nada fuera de la ley, sino lo que políticamente corresponde. ''No quiero ver moros con tranchete ni ando viendo enemigos donde quiera. Ahora estamos trabajando en cómo arreglar los asuntos del PRI y en cómo nos fortalecemos''.