El líquido se tiene que pagar, es la única forma de modernizar ese servicio, expone

Lichtinger: próximo, el acuerdo con EU sobre agua

El secretario del Medio Ambiente, Víctor Lichtinger, confirmó que está próximo un acuerdo con Estados Unidos para solucionar el conflicto del agua del río Bravo con ese país, que se dará a conocer en breve.

Dijo que ante el problema con el abasto de agua "hay que tomar el toro por los cuernos", porque en varias ciudades hay dificultades de abastecimiento del líquido. Mencionó el caso del Bajío y el norte del país, donde el asunto es "serio".

Entrevistado al concluir la ceremonia de clausura de los trabajos de cooperación del Centro Nacional de Investigación y Capacitación Ambiental (Cenica), agregó que en este momento se trabaja con los municipios para que continúe la descentralización de los servicios de agua.

Sobre un posible incremento en las tarifas del líquido, expuso que eso depende de cada municipio, porque habrá colonias donde se podrá pagar más que en otras, por lo que debe haber índices diferenciados. "No es lo mismo una colonia donde vive poca gente con recursos económicos a una donde viven más trabajadores de otro tipo de nivel socioeconómico", indicó.

"El agua se tiene que pagar, es la única forma en que la ciudadanía va a asegurar los recursos para mejorar, modernizar los servicios de agua, tener líquido potable y para usarlo satisfactoria y sustentablemente", agregó.

En relación con los permisos forestales, sostuvo que aunque la ley obliga al gobierno federal a cuidar los bosques, esto se llevará a cabo con la descentralización de las acciones para que participen los gobiernos estatales y municipales.

Convenios con Oriente

Ayer concluyó el acuerdo de cooperación entre México y Japón para impulsar la investigación científica en calidad del aire y residuos peligrosos. Entre las acciones que se adoptaron están el establecimiento del Cenica, en el que el gobierno japonés aportó 5 millones de dólares para establecer laboratorios de análisis con tecnología de punta.

Durante siete años se llevó a cabo el proyecto con la participación del Instituto Nacional de Ecología, de la Semarnat, y la Universidad Autónoma Metropolitana plantel Iztapalapa. Se establecieron ocho laboratorios equipados.

En ese centro de investigación se han desarrollado 22 proyectos en colaboración con otras instituciones. En los últimos dos años se puso en marcha el Plan Nacional de Monitoreo y Evaluación Ambiental.

ANGELICA ENCISO