Un engaño, la supuesta capitalización propuesta por Fox, dice

No aceptaremos eufemismos en la reforma eléctrica: Batres

Denuncia SME actos de corrupción en Luz y Fuerza del Centro

FABIOLA MARTINEZ Y GEORGINA SALDIERNAENVIADO

El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y el coordinador de los diputados del PRD, Martí Batres, rechazaron la propuesta del presidente Vicente Fox para "capitalizar" la industria eléctrica porque, dijeron, se trata de una vía para privatizar el sector.

"No admitimos que se meta por la puerta de atrás lo que no pudieron meter en la Constitución ni tampoco que se utilice ese tipo de eufemismos", señaló el diputado Batres, cuyo partido acordó en su reciente Consejo Nacional evitar la apertura de la industria eléctrica al capital privado y, en cambio, gestionar las reformas necesarias para dotar de autonomía financiera a las empresas del sector.

Por su parte, el SME denunció el "apoyo" de la Comisión Reguladora de Energía a "empresas fantasmas" que ejecutan de manera parcial servicios de instalación de energía eléctrica en fraccionamientos habitacionales, cuya adecuación técnica final realizan -con recursos públicos- trabajadores de Luz y Fuerza del Centro (LFC).

Se trata de empresas que de manera frecuente cambian de razón social para continuar ejerciendo contratos para la electrificación de predios que al final tienen que ser acondicionados por personal de LFC adscrito al área de distribución (líneas aéreas y cables subterráneos).

"Hay empresas fantasmas en las que están atrás funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad y Luz y Fuerza del Centro que abusan de las leyes y reglamentos que les permiten participar en trabajos de electrificación", dijo Braulio García, secretario del interior del SME.

Ante casos como el anterior, el SME reiteró su apoyo a la iniciativa de reforma al sector eléctrico que promueven PRI y PRD, como única opción de atajar la participación de empresas privadas que hasta ahora se han adjudicado al menos 10 por ciento de la materia de trabajo del personal sindicalizado de LFC, y para hacer realidad la autonomía financiera de esta empresa.

En 1994, el ex presidente Carlos Salinas de Gortari otorgó a LFC la categoría de organismo público descentralizado con patrimonio y personalidad jurídica propias, con el fin de impulsar el desarrollo de esta empresa que atiende a los habitantes de la ciudad de México y estados colindantes.

Sin embargo, señaló Ramón Pacheco, vocero del SME, el decreto de 1994 quedó en letra muerta, porque en la realidad esta empresa presenta en sus estados contables una deuda con el gobierno federal por más de 21 mil millones de pesos, mientras que el presupuesto de este año asciende a 14 mil millones de pesos.

La estrategia del SME es apoyar la iniciativa de ley que promueva la modernización de LFC en el contexto de la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, es decir, sin necesidad de aplicar cambios constitucionales, como plantea el presidente Vicente Fox y el PAN. De igual forma hacer valer los dictámenes que frenaron los intentos de apertura de la industria al capital privado, emitidos por el Senado y la Suprema Corte de Justicia de la Nación.