Extremistas palestinos asesinan a cuatro colonos judíos en las cercanías
de Hebrón
Condena el secretario general de Naciones Unidas los
recientes actos de violencia en Medio Oriente
Comenzó el Consejo de Seguridad nuevas consultas sobre el bombardeo
israelí en Gaza
REUTERS, DPA Y AFP
Nueva York, 26 de julio. El Consejo de Seguridad
de la Organización de Naciones Unidas (ONU) empezó hoy nuevas
consultas sobre Medio Oriente a raíz del bombardeo israelí
en la franja de Gaza, mientras en respuesta ex-tremistas palestinos dieron
muerte esta noche a cuatro colonos en las cercanías de la ciudad
cisjordana de Hebrón.
A todo esto, el secretario general de la ONU, Kofi Annan,
condenó este viernes los recientes actos de violencia en Levante
y reiteró su llamado a israelíes y palestinos para que reanuden
las pláticas de paz.
Por el ataque, unos 3 mil libaneses y pa-lestinos se reunieron
en Tiro, en el sur de Líbano, convocados por Hezbollah, para protestar
contra "las matanzas perpetradas por Israel en Palestina", el lunes, de
las que también culpan a Estados Unidos.
También en Manama, miles de personas se congregaron
frente a la sede de la ONU en Bahrein para repudiar el ataque israelí,
en el que perdieron la vida 10 civiles palestinos, además de un
jefe del movimiento de resistencia islámica Hamas, Salah Shehade,
mientras en Marruecos un centenar de personas expresaron su solidaridad
con los pa-lestinos ante la sede de Naciones Unidas.
En
el campo de refugiados de Jabaliya, en el norte de la ciudad de Gaza, casi
5 mil partidarios de Hamas efectuaron una manifestación contra las
operaciones militares de Israel y prometieron vengar la muerte de Shehade,
jefe del brazo armado de esa organización, las Brigadas Ezzedin
al Qazam.
Por los altavoces los dirigentes de Hamas gritaban que
las brigadas van a perpetrar atentados suicidas en todo Israel, al tiempo
que el dirigente Abdelaziz al Rantissi afirmó que "la respuesta
será un terremoto".
Adelantó que este acto es una señal de obediencia
al nuevo jefe del brazo armado, cuya designación fue anunciada hoy
pero cuya identidad no dio a conocer, aunque en Israel se dijo que es Mohammed
Deif.
Rantissi anunció que la policía palestina
detuvo en Gaza a varias personas sospechosas de haber colaborado con Israel
en la operación que costó la vida de Shehade.
Por su parte, el Ejército Popular Batallones del
Regreso, grupo armado ligado a Fa-tah, movimiento del presidente palestino
Yasser Arafat, estableció una "lista de criminales de guerra" israelíes
a los que pretende eliminar, "en respuesta a la masacre de nuestro pueblo
en Gaza".
Dicho grupo coloca a la cabeza de la lista de 20 nombres
al primer ministro israelí, Ariel Sharon, y a su antecesor Ehud
Barak, además del jefe del estado mayor del ejército, Moshe
Yahalon, y a su predecesor Shaul Mofaz, así como al jefe de los
servicios secretos Avi Dichter, entre otros. Fatah rechazó más
tarde haber elaborado esa lista.
Otro grupo armado de Fatah, las Brigadas de los Mártires
de Al Aqsa, reivindicó la muerte de los cuatro colonos, tres de
los cuales, una pareja y su hija, fueron alcanzados por disparos en su
vehículo en la colonia judía de Pesagot, mientras que el
cuarto murió en las mismas circunstancias en Zif.
Israel pidió a la comunidad internacional que condene
esta emboscada. "Hemos sido condenados por la eliminación de Shehade;
esperamos como mínimo las mismas condenas por este acto de terrorismo",
declaró el portavoz gubernamental Avi Pazner.
Las acciones militares israelíes dejaron un palestino
muerto por disparos en Kalkiliya, mientras otros cuatro fueron heridos
en Gaza, cerca de la colonia judía de Netzarim, durante una operación
en la que el ejército dijo haber destruido tres talleres y 22 máquinas
que servían para la fabricación de cohetes Qassam
y granadas de mortero.
Las tropas también detuvieron a un joven palestino
sospechoso de pretender cometer un atentado contra religiosos judíos
que rezaban en la tumba del patriarca José, en Nablus, además
de que arrestaron a nueve colonos que habrían vendido grandes cantidades
de armas a extremistas palestinos.
En este contexto, el presidente de Egipto, Hosni Mubarak,
advirtió en Madrid sobre el peligro de una escalada de violencia
en Levante por "la acción incompresible de Israel", en rueda de
prensa conjunta con el presidente español, José María
Aznar.
Reiteró su confianza en Arafat y la necesidad de
negociar con él para resolver el conflicto en la región,
al tiempo que aclaró que su posición es diametralmente opuesta
a la del presidente George W. Bush.
Aznar fue más cauto cuando dijo que el presidente
de la Autoridad Nacional Palestina es Arafat, "pero esto no quiere decir
que teniendo en cuenta los procedimientos previstos y las decisiones que
puedan adoptar los palestinos, eso no pueda cambiar".
Estados Unidos, en tanto, exigió cuatro condiciones,
incluida una condena al terrorismo, para no vetar el proyecto de resolución
sobre Medio Oriente en el Consejo de Seguridad, que hoy comenzó
consultas, las que serán continuadas el lunes.