Desalojos y agresiones mediante la CNC y el PRI, las quejas; exige salida de paramilitares

Denuncia organización hidalguense campaña intimidatoria del gobierno de Núñez Soto

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Huejutla, Hgo., 3 de agosto. El gobierno estatal, por conducto del PRI y la Confederación Nacional Campesina (CNC), inició una campaña de "difamación, desalojo, despojo de tierras, agresiones y amenazas de muerte contra militantes del Frente Democrático Oriental de México Emiliano Zapata (FDOMEZ)", aseguraron dirigentes de esa organización, durante un mitin realizado en la plaza principal de este municipio huasteco.

Ramiro Díaz Baltazar, vocero de esa organización, dijo que como parte de la acometida, se conformó una banda paramilitar autodenominada FIR Antonio Reyes, El Tordo, compuesta por guerrilleros "que cometen atropellos en las comunidades con presencia del frente".

A su vez, Francisco Antonio Hernández, vicepresidente del Comité de Derechos Humanos del la Huasteca Hidalguense y Sierra Oriental, informó sobre el aumento en las quejas de militantes de ese frente democrático, por delitos y agravios cometidos por militantes de la CNC.

Indicó que el caso más reciente perjudicó al indígena Quirino Santiago Hernández, de la comunidad Ecuatitla, quien el 27 de julio pasado fue desalojado de su casa y cuyas pertenencias se arrojaron al atrio de la parroquia local.

Añadió que en el poblado La Mesa Limantitla, municipio de Huejutla, y en Coatapa, municipio de Atlapexco, renunciaron casi 150 militantes del FDOMEZ, lo que dirigentes de la organización atribuyeron a presiones y amenazas ordenadas por el delegado regional de la CNC, Jorga Lara Sánchez, primo de la ex alcaldesa de Huejutla y actual diputada local, María del Carmen Lara García.

De acuerdo con líderes de esa organización, estas acciones que favorecen la militarización de la Huasteca son promovidas desde Pachuca por el gobierno del estado y localmente por el PRI, la víspera de los comicios del 10 de noviembre entrante, en que se renovarán los 84 ayuntamientos.

Con pancartas y consignas, más de cien militantes del FDOMEZ exigieron la salida de los paramilitares de comunidades huastecas, sobre todo en los municipios de Huejutla, Atpalexco, Huautla y Yahualica. Además, acusaron que desde las renuncias de sus compañeros amenazados por la CNC, la policía regional vigila Ecuatitla y La Mesa Limantitla.

Para el frente, estas acciones son parte de una estrategia del gobierno estatal por aniquilarlos, pues no se han sometido "a las agrupaciones oficialistas pagadas por el gobierno". Se quejaron que de esta manera se pretende justificar la militarización en Hidalgo, lo mismo que los desalojos, asesinatos y matanzas, como la ocurrida el 14 de mayo de 1977 en la comunidad Huitzotlaco, donde murieron emboscados cuatro indígenas y 12 resultaron heridos.

El portavoz Ramiro Díaz dijo que el 24 de abril del año pasado, el gobernador Manuel Angel Núñez Soto visitó el municipio de Atlapexco y se reunió con militantes del FDOMEZ, con quienes se comprometió a cumplir 58 puntos de un pliego petitorio, de los cuales no se ha cumplido ninguno, a pesar de las pláticas con el director de Gobernación estatal, Manuel Sánchez Olvera.

Mediante un comunicado, el grupo campesino denunció asimismo que en las comunidades Cuatapa, La Mesa Limantitla, Ecuatitla y Xiquila "imperan las amenazas de muerte, expulsiones y agresiones físicas", lo que, en su opinión, demostraría que el gobierno del estado y el alcalde de Huejutla, Carlos Fayad Ruiz "prefieren la violencia y la represión".