Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Lunes 12 de agosto de 2002
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Deportes
El uruguayo Marcelo Lipatín anotó en su primer contacto con el balón

América estrena el título con gris triunfo; 1-0 a decepcionantes Chivas

Zamorano falló un penal; el arquero Oswaldo Sánchez evitó una goleada

Guadalajara, Jal., 11 de agosto. El América estrenó su corona con victoria gris sobre las desfiguradas Chivas, apenas por 1-0 en un clásico que resultó de escasa calidad. Aguilas mostró ganas pero poca puntería al ataque, mientras que el Guadalajara resultó el vivo reflejo del desánimo y el desconcierto.

Basta decir que la figura de los tapatíos fue otra vez el portero Oswaldo Sánchez, quien detuvo un penal al chileno Iván Zamorano y evitó la goleada con al menos otras tres atajadas. América rescató el triunfo gracias a una corazonada del técnico Mario Carrillo, cuando en la recta final ingresó al uruguayo Marcelo Lipatín en lugar del Bam-Bam, y en su primer contacto con el balón marcó el solitario gol.

América, que tiene pendiente el partido de la fecha uno contra Pachuca, sumó sus primeros tres puntos, en tanto que Chivas comienza a rezagarse en el sector cuatro, donde tiene un punto.

El estadio Jalisco lució pletórico, acorde con la expectativa que siempre despierta el clásico del futbol mexicano, pero todo ocurrió de un solo lado, favorable al equipo visitante.

De manera repetida se fueron escapando las opciones de los amarillos, a pesar de estar armados con su máxima artillería, compuesta por Christian Patiño, Zamorano y Cuauhtémoc Blanco; sin embargo, el trío lució errático en el tiro a meta, sin potencia en sus disparos y con pocas variantes.

La acción más cercana al gol llegó al minuto 23, cuando Blanco estrelló el esférico en el cuerpo del Tiburón Sánchez; el árbitro Ramos Rizo creyó que el defensa había cometido mano y decretó la pena máxima, que cobró Zamorano; Oswaldo se lanzó a la izquierda y rechazó el tiro para preservar el cero.

Las respuestas del chiverío eran tibias y sin orden. Ramón Morales sólo desbordó un par de veces, pero sus centros resultaron sin destinatario; al minuto 44 soltó un trallazo cercano y ése fue su máximo aporte. En el anonimato quedaron las figuras de Ramón Ramírez y Emilio Mora.

A los 47 de acción volvió a agigantarse el portero de Chivas al desarmar a Patiño en un mano a mano. Más tarde fue Blanco quien entró trompicándose entre dos zagueros, cayó al suelo y desde ahí quiso rematar, pero a gatas llegó Oswaldo para recuperar el balón.

El entrenador Daniel Guzmán ingresó a Omar Bravo y a Alberto Medina, pero estuvo más atinado su contrincante Mario Carrillo, quien tras meter a Hugo Castillo envió a la cancha a Lipatín, que al 83, un minuto después de haber entrado, anotó el gol al aprovechar largo servicio del Misionero Castillo.

Desde posición incómoda y de primer toque, Lipatín cuchareó el balón ante la precipitada salida de Oswaldo, el esférico dibujó la parábola y anidó en las redes.

El silbante Felipe Ramos tuvo irregular actuación, pues marcó inexistente penal y no vio el cometido al minuto 72 por Joel Sánchez al desviar con la mano un cabezazo de Zamorano.

Chivas buscó con más desesperación que orden el empate, y América estuvo a punto de hacer más amplia su ventaja cuando a los 89 de acción José Antonio Castro hizo volar a Oswaldo, quien con la mano derecha alcanzó desviar su potente disparo.

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