La propuesta plantea reformar los artículos 27 y 28 de la Constitución
Recibe el Senado iniciativa foxista para abrir el sector
eléctrico al capital privado
Piden el Presidente y Creel a legisladores debate razonado y no descalificarla
El proyecto se turnará el próximo miércoles a la Comisión
Permanente del Congreso
A. BECERRIL, M. CUELLAR, A. CASTELLANOS Y R. DAVALOS
El presidente Vicente Fox envió ayer al Senado
de la República la iniciativa de reformas a los artículos
27 y 28 de la Constitución, así como a cuatro leyes reglamentarias,
para abrir el sector eléctrico al capital privado. La propuesta
se turnará el próximo miércoles a la Comisión
Permanente del Congreso de la Unión.
El proyecto, finalmente, no incluyó otorgar concesiones
a empresas privadas para participar en la refinación de petróleo,
gas y petroquímica básica, como se planteaba en la reforma
integral al sector energético, puesta a consideración de
manera previa de las fracciones parlamentarias de PRI y PRD y que La
Jornada hizo pública en días pasados.
La iniciativa, que ayer por la tarde llegó al recinto
de Xicoténcatl, sólo incluye la privatización de la
electricidad, lo cual motivó que el presidente de la Comisión
de Energía del Senado de la República, el panista Juan José
Rodríguez Prats, expresara "decepción y tristeza", porque
"no haya habido los arrestos suficientes para ir a los cambios que requiere
el país" y mantener "la reforma energética integral que se
había planteado en un principio".
Pide el Presidente intercambio razonado de ideas
Tanto el presidente Fox como el secretario de Gobernación,
Santiago Creel, aseguraron que no se privatizará la Comisión
Federal de Electricidad (CFE) y se mantendrá la rectoría
del Estado en materia eléctrica. Además pidieron a los legisladores
un intercambio de ideas razonado para no descalificar de entrada la propuesta.
El contenido de la iniciativa presidencial no se dio a
conocer, pero fuentes consultadas en el Congreso confirmaron que se trataría
de la propuesta en materia de electricidad incluída en el Proyecto
de Modernización Integral del Sector Energético, en el que
se plantean cambios y adiciones al párrafo sexto del artículo
27 y al párrafo cuarto del 28 constitucionales, así como
a leyes secundarias para crear un mercado paralelo de energía y
dejar en manos de particulares el abasto de los grandes consumidores de
ese recurso.
Es un planteamiento que las autoridades de la Secretaría
de Energía y de la CFE habían cabildeado antes con los coordinadores
de los senadores de PRI y PAN, pero que si bien plantea fortalecer a la
CFE le quita a los grandes consumidores para pasarlos a las empresas privadas,
a las que se darán concesiones de 30 años, que pueden ser
prorrogados por 30 años más.
La
iniciativa llegó ayer a las 17 horas al Senado de la República,
y tanto Diego Fernández de Cevallos como Enrique Jackson Ramírez,
presidentes de la mesa directiva y de la Junta de Coordinación Política
de esa cámara, respectivamente, aseguraron no conocer en detalle
el contenido de ésta. Señalaron que este miércoles
se presentará ante el pleno de la Comisión Permanente, para
turnarla de inmediato a las comisiones que dictaminan los proyectos de
reforma de PRI y PRD en la materia.
Fue el secretario de Gobernación, Santiago Creel
Miranda, el primero en confirmar que la controvertida iniciativa ya había
sido remitida a la Cámara alta y el primero también en precisar
que el gobierno del presidente Fox "convoca a la reflexión profunda
y no a la descalificación ligera", pues el país requiere
"actores políticos con madurez y, sobre todo, que sean capaces de
llegar a acuerdos".
El gobierno, apuntó, convoca "a que respetuosamente
podamos entrar a un intercambio de ideas, que es lo que el país
necesita; requiere actores políticos con madurez, con respeto en
su habla, en su interlocución". Si bien el titular de Gobernación
dijo que las autoridades buscarán acercarse a todas las fuerzas
que están representadas en el Congreso, también señaló
que "estamos en la inteligencia de construir la mayoría que necesitamos
para que pase nuestra reforma".
Explicó que la iniciativa se envió a la
Cámara de Senadores porque es ahí donde precisamente están
otras "que estamos dispuestos a considerar, a valorar, a ver que podamos
llegar a puntos de encuentro de manera responsable y, sobre todo, en beneficio
de todos los mexicanos. Eso es lo que buscamos".
En una entrevista que ofreció en las instalaciones
del Instituto Federal Electoral (IFE), donde clausuró los trabajos
del coloquio Cultura política y prácticas ciudadanas,
Creel señaló que el gobierno está cierto de que se
abrirá un debate "maduro, responsable", en el que todos los sectores
tendrán oportunidad de expresar sus puntos de vista e ideas, y que,
a partir precisamente de ese intercambio de ideas, se llegará a
conclusiones satisfactorias para la nación.
Sin entrar en detalles sobre el contenido de la iniciativa
-sólo aludió a reformas constitucionales y también
en materia de legislación secundaria-, el Secretario de Gobernación
dijo confiar en la "madurez y razón de todos los actores políticos
para que el proyecto de reformas salga adelante. Amén de posiciones
extremas, vamos a buscar lugares comunes, a tratar de privilegiar donde
estemos más cerca los partidos, el gobierno y los legisladores,
y a tratar de alejarnos de nuestras diferencias".
Afirmó que la Secretaría de Gobernación
tiene la responsabilidad de "buscar acercamientos" para facilitar los encuentros,
y anunció que a partir del próximo lunes estará muy
atento de que, una vez que la iniciativa sea turnada a comisiones, la dependencia
a su cargo se acerque a los legisladores para formular esquemas de discusión
y debate para que el Ejecutivo pueda intervenir en él.
No perderá el Estado la rectoría en el
sector
En tanto, en gira por Tlaxcala y San Luis Potosí,
el presidente Fox recalcó también que la iniciativa que ayer
remitió al Congreso no pretende privatizar la Comisión Federal
de Electricidad o que el Estado pierda la rectoría en el sector.
El Ejecutivo federal dijo que espera un intercambio de
ideas "razonado" con el Poder Legislativo, que se aparte de los sentidos
políticos partidistas para pensar sólo en México.
Espero, abundó, que salga bien. No hay privatización ni se
pierde soberanía.
-¿Entonces cómo será la participación
de particulares sin privatizar? -le preguntaron al pie del avión
presidencial.
Y contestó que los particulares construirán
nuevas plantas que complementarán las inversiones que se requieren
en el segmento. Ahí están las 17 plantas que operan con participación
privada, en los que "laboran trabajadores del sindicato y donde todos salen
ganando".
"Lo único que estamos haciendo -sostuvo- es abrir
espacios" para los inversionistas privados. Con ello se logrará
que los fondos fiscales que hoy se destinan a la CFE se canalicen al gasto
social. "Vamos a asegurar que esa inversión sea mayoritariamente
mexicana", prometió.
Por ello, añadió, el sindicato eléctrico
está de acuerdo con la idea, "porque se ha visto beneficiado", porque
no hay privatización ni pérdida de soberanía. Tampoco
se lesionan los derechos de los trabajadores, asentó.
Se necesitan cambios constitucionales para "lograr la
propuesta que queremos". Los particulares, refrendó, construirán
nuevas plantas como las que ya están en marcha.
Tampoco la Secretaría de Energía dio a conocer
la iniciativa presidencial; por la noche, la dependencia a cargo de Ernesto
Martens expidió un comunicado en el que se precisa que el paquete
que el titular del Ejecutivo envió al Poder Legislativo incluye
reformas a los artículos 27 y 28 constitucionales, además
de modificaciones y adiciones a la ley del servicio público de energía
eléctrica vigente, a las leyes orgánicas de la Comisión
Federal de Electricidad y del Centro Nacional del Control de Energía,
así como reformas a la Ley de la Comisión Reguladora de Energía
(CRE).
La Secretaría de Energía expuso que "el
país espera y demanda un crecimiento que permita resolver las necesidades
básicas de amplios sectores de la población", y la propuesta
del Ejecutivo federal parte del reconocimiento de que es necesario continuar
los esfuerzos de los sectores privado y social y los del gobierno.
Agrega: "somos testigos respetuosos del enorme esfuerzo
que realizan los legisladores para construir acuerdos; estamos seguros
de que ante este nuevo reto sabrán encontrar la mejor solución
a los problemas que afronta la nación. La decisión final
corresponderá al Congreso de la Unión; de sus resultados
dependerá que se garantice al país un suministro de energía
eléctrica oportuno y en cantidades suficientes para impulsar su
desarrollo económico y social".
De acuerdo con informes obtenidos en la dependencia, se
dará autonomía a la Comisión Reguladora de Energía
y atribuciones al cien por ciento al Centro Nacional de Control de Energía.
Los textos que integran esta iniciativa presidencial se darán a
conocer de acuerdo con las formalidades que determine el Congreso de la
Unión para el análisis de la propuesta.
El debate sobre el destino del sector eléctrico,
precisó la Secretaría de Energía, ha sido intenso
y prolongado, han participado amplios sectores de la sociedad y el gobierno
federal ha estado atento al mismo, lo que le ha permitido elaborar una
propuesta "sólida, reflexiva, pero sobre todo responsable con el
futuro del país".
Ante la necesidad de nuevas inversiones y de dar certidumbre
jurídica a las ya existentes se requiere aplicar soluciones de fondo
como las que se someten a consideración del Congreso de la Unión.
La propuesta
De acuerdo con fuentes consultadas en el Congreso, la
iniciativa presidencial en materia eléctrica propone la creación
de un mercado paralelo de energía, en el que empresas privadas,
nacionales y extranjeras, podrían participar en generación
y venta de electricidad, conjuntamente con la CFE y Luz y Fuerza del Centro,
pero con ventaja para los consorcios particulares, ya que éstos
se quedarían con los grandes consumidores de energía, es
decir, con los clientes que generan 60 por ciento de los ingresos de la
paraestatal.
En la iniciativa foxista se precisa que los cambios propuestos
al artículo 27 de la Carta Magna responden a la necesidad de elevar
a rango constitucional el derecho de los particulares a realizar inversiones
tendentes a generar y aprovechar total o parcialmente el fluido eléctrico
que produzcan, además, a realizar inversiones en instalaciones industriales
que generen la energía requerida por los organismos públicos
CFE y Luz y Fuerza del Centro, y su atribución para adquirir electricidad
procedente de centrales de generación de particulares o de otras
entidades paraestatales, como podría ser Pemex.
La propuesta refiere que determinados usuarios de energía
eléctrica podrán elegir entre recibir suministro de algunos
de los organismos del gobierno federal o de otro generador particular con
quien contraten el abastecimiento, siempre que cumplan con los requisitos
y tengan un nivel de consumo previsto en la ley reglamentaria. Esta actividad
económica queda fuera del servicio público exclusivo del
Estado, ya que no se trata de una función pública, sino de
una actividad económica de producción de un bien comerciable.
Aunque la iniciativa reconoce y conserva el servicio público
de electricidad como exclusivo de la nación, por lo que los bienes
y recursos que esa actividad demande estarán bajo la propiedad y
el control del gobierno federal o de las entidades públicas que
se establezcan, "desde luego la propuesta eleva a rango constitucional
la garantía y el derecho de libre acceso y uso no discriminatorio
de la red nacional de transmisión y de las redes de distribución".
Parte medular del proyecto es reforzar la Comisión
Reguladora de Energía, facultándola para fijar tarifas y
metodología de precios, además de darle atributos para representar
los intereses de los usuarios. Igualmente se propone una nueva ley orgánica
del Centro Nacional de Control de Energía para convertirlo en un
órgano independiente que garantice el despacho eléctrico.
En el Senado, después de la polémica que
provocó la filtración del contenido de la propuesta
presidencial para reformar de manera estructural al sector eléctrico,
anoche el panista Diego Fernández de Cevallos no quiso meterse en
más problemas y aseguró que desconoce el contenido del paquete
legislativo, y que ni siquiera pidió el documento, "para evitar
cualquier cosa", y será hasta el martes cuando lo analice ya en
la reunión de la mesa directiva.
Sin embargo, el coordinador priísta, Enrique Jackson
Ramírez, confirmó que la iniciativa que ayer se recibió
en el Senado se refiere exclusivamente a reformas al sector eléctrico,
misma que se pasará el miércoles al pleno de la Comisión
Permanente, de donde se turnará a las comisiones que dictaminan
las otras iniciativas en la materia.
Sobre el tema, el panista Juan José Rodríguez
Prats dijo que se siente decepcionado, ya que Fox no hizo llegar finalmente
la propuesta integral de reforma al sector energético. "Con tristeza,
con decepción, lamento mucho que nada más se incluya lo referente
a la electricidad y no vengan también las modificaciones en gas
natural, petroquímica y refinación". Reiteró que eso
le sorprende porque, "hasta donde me quedé, iba a ser una reforma
integral. Esto tendrá que explicarlo el Ejecutivo".