Si bien se superó una recesión de 15 meses, el país queda pendiente de la evolución de EU
En duda, un posible crecimiento vigoroso de la economía mexicana
Se esperan tiempos difíciles tanto para Estados Unidos como para México, afirman expertos
AFP
La economía mexicana, la segunda más importante de América Latina después de Brasil, logró superar una recesión de 15 meses, pero la posibilidad de un crecimiento vigoroso fue puesta en duda por analistas ante la débil recuperación de Estados Unidos, principal socio comercial de México.
El jueves pasado, la Secretaría de Hacienda informó que el producto interno bruto (PIB) mexicano creció 2.1 por ciento en el segundo trimestre de 2002.
Ese incremento compensa prácticamente el 2 por ciento de pérdida del primer trimestre y deja al país más pendiente de la evolución de la economía de Estados Unidos.
''Es claro que la recesión de la economía mexicana, iniciada a finales de 2000, ha terminado ahora, aunque la fuerza de la recuperación dependerá principalmente del desempeño de la economía estadunidense", co- mentó a la Afp Miguel Palomino, analista en jefe para América Latina de la firma de corretaje Merrill Lynch.
El gobierno mexicano espera para este año que el PIB aumente 1.8 por ciento, tasa similar al crecimiento anual de la población. En 2001 la economía del país tuvo una caída de 0.3 por ciento, después de haber crecido 6.9 por ciento en 2000.
Entre 1996 y 2000, la economía mexicana logró una tasa de crecimiento promedio anual de 5.5 por ciento, sostenida por el auge de Estados Unidos, país con el que junto con Canadá integra el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, en vigor desde 1994.
''Virtualmente todo el crecimiento del segundo trimestre (de este año) fue producto de que en este periodo hubo más días laborales que en el mismo lapso del año anterior'', dijo Palomino.
En México, la celebración de la Semana Santa ocurrió este año en el primer trimestre, mientras que en 2001 fue en el segundo.
Rodolfo Navarrete, analista en jefe de la casa de bolsa Vector, comentó que en la última semana se dio a conocer que la economía de Estados Unidos, destino de 85 por ciento de las exportaciones mexicanas, había pasado de crecer 5.1 por ciento en el primer trimestre de 2002 a sólo 1.1 por ciento en el segundo.
''Una posible recaída de la economía estadunidense podría implicar para México también una presión bajista sobre la producción, dado que uno de los motores importantes del crecimiento mexicano son las exportaciones", dijo Navarrete. ''Se esperan tiempos difíciles tanto para la economía estadunidense como para la mexicana'', comentó.
Para Carlos Perezalonso, analista financiero de la casa de bolsa BBVA Bancomer, el desempeño de la economía mexicana en el segundo trimestre no es sinónimo de que se haya iniciado una recuperación vigorosa. "Aquí es importante puntualizar que aun cuando la evolución del PIB en el segundo trimestre fue positiva, no es concluyente de una recuperación sostenida debido a la debilidad económica que todavía presenta Estados Unidos", afirmó.