Presentó su disco Revolución de amor, en el que participaron
Blades y Santana
El zapatismo no es una moda, es un concepto de justicia,
afirma Maná
"Creemos en los derechos humanos, en el respeto a nuestra madre tierra",
expresa
La nueva producción incluye baladas, salsas, rocanrol y una mezcla
de todo esto
ARTURO CRUZ BARCENAS
En voz de su vocalista, Fher Olvera, el grupo mexicano
de rock Maná expuso ayer -durante la presentación de su nuevo
disco, Revolución de amor, en el que participaron Rubén
Blades y Carlos Santana- su postura sobre el conflicto en Chiapas: "El
zapatismo no puede ser una moda; la injusticia no es una moda. El zapatismo
no es solamente la protección de unos indígenas en Chiapas;
el zapatismo es un concepto de justicia, de libertad, de tierra, de trabajo,
salud, educación. Es mucho más de lo que se cree que es el
subcomandante Marcos.
"Pienso que si se ha tomado -el zapatismo- como una moda,
eso es irrelevante para nosotros. Lo que creemos es que el zapatismo sí
ha cambiado las estructuras de fondo de este país; lo ha hecho más
libre, lo ha hecho con más conciencia. No digo que ya llegamos,
pero por lo menos mostró toda esa tramoya de la corrupción
y la falta de democracia, y los 71 años del PRI. Ha sido un movimiento
para bien de nuestro país y ojalá sepamos pronto algo de
ellos. El silencio (de los zapatistas y sus interlocutores) es un poco
peligroso... pero, bueno, vamos a ver qué pasa", agregó el
intérprete de Vivir sin aire.
-¿Qué tan revolucionarios son ustedes?
-¿Qué
te puedo decir? No queremos colgarnos ninguna medalla. No somos revolucionarios.
Hacemos nuestra chamba y somos ecologistas, humanistas, creemos mucho en
los derechos humanos, en el respeto al medio ambiente, a nuestra madre
tierra. Es muy difícil decir qué hemos aportado: el tiempo
dirá; el tiempo es el único juez. Ahorita sería inoportuno.
Nuestros discos de hace unos años les gustan a chavitos de ahora.
Eso nos hace pensar que quizá no estamos tan equivocados.
-¿Por qué meterse en camisa de once varas
con temas como el de los derechos humanos, por ejemplo?
-Somos una parte de todo. Hay una frase que me gusta mucho:
tú no puedes amar algo que no conoces.
-¿Qué pasó con el disco que se prometió
del concierto por la paz, en el estadio Azteca?
-No sabemos qué pasó con el disco, pero
el concierto fue algo histórico.
Y se definió con sus compañeros: "Maná
siempre ha sido un grupo muy espontáneo, nunca ha sido un grupo
de egos ni de protagonismos. Aquí si alguien tiene ganas de cantar,
¡va! En el próximo disco igual y canta Juan (Calleros, bajo)
o Sergio (Vallín, guitarra). Eso es algo natural".
Las cifras
Maná en números: ha ganado cuatro Grammys
y vendido más de 16 millones de discos en el mundo; en 1998, durante
su más reciente tour por Estados Unidos, agotó todos
los boletos en sus presentaciones en 32 ciudades; su cidí Cuando
los ángeles lloran (1995) tuvo una venta de un millón
de copias. Acaban de regresar de su gira europea, en la que triunfaron
en lugares difíciles para cualquier banda, como Alemania.
En su nueva producción (primera en estudio desde
1997), titulada Revolución de amor, presentada ayer en conferencia
de prensa efectuada en el Museo Rufino Tamayo, ante decenas de medios de
comunicación, las canciones son baladas, salsas y rocanrol. Y mezclas
de todo esto y más. Revolución de amor.
-¿Por qué tanto énfasis en el tema
del amor?
Fher: "La palabra más grande que existe en el universo
es amor. Nuestro álbum ofrece amor a diversos niveles: amor carnal,
entre tu chava y tú, amor por tus padres, amor por tu prójimo,
amor por las etnias indígenas de Latinoamérica; es una forma
que tenemos nosotros para poder solucionar o, al menos, mitigar los grandes
problemas que existen en el mundo, no sólo en México.
"Toda la intolerancia que tenemos en el país, en
el continente, en el planeta, es por falta de amor; hay que darnos un poco
más, ¿no? Es un poco idealista, un poquito difícil,
¿no? Pensamos que nuestra propuesta es válida porque es muy
incluyente. Es amor al planeta, a tu madre tierra, que te vio nacer y te
mantiene vivo. Por eso esta palabra es la más fuerte que existe,
¿no?"
También es evolución
Intervino Alex González (baterista): "Mucha gente
tiene la mala información de que revolución significa una
especie de anarquía, siempre relacionado (el término) con
revoluciones violentas, ¿no? ¡Pero también significa
evolución! Y es también como tener una manera de decir: vamos
a unir dos palabras (las del título de su disco) y como seres humanos
evolucionar nuestra manera de ser".
Sobre sus viajes, sus exitosas giras, Alex dijo: "Para
nosotros ir a España siempre fue un sueño. Sucedió.
Lo más interesante es que vamos a Europa y cantamos en español.
Expresamos cosas que vemos que pasan en Latinoamérica. Observamos
que los europeos ven a esa región así, como una cosa increíble.
Por eso vamos para allá".
Fher da un consejo a las nuevas bandas: "Aprendan: nosotros
nos caímos 10 veces y las 10 nos levantamos. Aprendimos de los fracasos".
De Carlos Santana, con quien grabaron el exitoso tema Corazón
espinado (del cidí Supranatual), expresó: "Nos
dijo que le gustaría hacer otra gira con nosotros porque en la pasada
sintió muy buena vibra".
Fher señaló que en torno a la relación
de Santana con Javier Bátiz hay muchos mitos. Y sobre otros grupos:
"Las cosas con los colegas va mejorando porque, la neta, la verdad,
antes éramos más pinches envidiosos".
Anunciaron que iniciarán una gira larga; la primera
parte en Estados Unidos, en septiembre, y seguirán por España.
Planean realizar -por medio de su organización Selva Negra- una
siembra de un millón de árboles, en un sólo día,
en varios estados de la República.