Reparte volantes de rechazo a enmiendas para
desincorporar el sector eléctrico
Organiza el SME marchas contra la privatización
El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) distribuye
entre sus agremiados y ciudadanos en general un volante dirigido al "pueblo
de México" en el que se asegura que el presidente "Vicente Fox insiste
en privatizar la industria eléctrica", pese a que en su campaña
se comprometió a defender las empresas estratégicas.
En los primeros pasos del plan de acción del SME
en repudio a la iniciativa de reforma a los artículos 27 y 28 constitucionales,
los electricistas explican que desde el 24 de abril el Senado de la República
dictaminó en contra y desechó las iniciativas en esa materia.
Además, la Suprema Corte de Justicia de la Nación
calificó de fraude la ley de participación del capital privado
en la industria eléctrica, otra vía mediante la cual el Ejecutivo
federal buscó legalizar mayor apertura para inversionistas privados
en esa industria, expone el SME.
En el volante, en el que figura el logotipo del Frente
Nacional de Resistencia contra la Privatización de la Industria
Eléctrica, ese sindicato da a conocer que el Presidente pretende
regalar a las empresas internacionales lo que es propiedad del pueblo de
México.
"Manos mexicanas tardaron un siglo en construir nuestra
industria eléctrica, (la cual) hoy el PAN y Vicente Fox quieren
entregar a capitalistas extranjeros. Poco les importa que en lo que va
de este sexenio se hayan perdido 600 mil empleos y que la miseria afecte
ya a 70 millones de mexicanos."
Agregan que al privatizar la industria eléctrica,
Fox y el PAN muestran su desprecio por los mexicanos, "traicionando el
voto de quienes confiaron en ellos y sirviendo descaradamente a los banqueros
y los inversionistas".
Al final del volante llaman al pueblo a impedir un despojo
a la nación y un atropello a la Constitución. Enseguida,
con la leyenda "Todos al Zócalo de la ciudad de México",
convocan a marchas contra la privatización el 30 de agosto y el
27 de septiembre próximos a las cinco de la tarde, que define como
movilizaciones "por la soberanía del país".