BAJO LA LUPA

Alfredo Jalife-Rahme

La petrocracia voltea hacia Africa

El golfo de Guinea desplazaría al Pérsico

Muy nerviosos, los estrategas bélicos de EU

LA PETROCRACIA anglosajona compuesta por las "cuatro hermanas" del eje Houston-Londres ya no sabe qué golfo marítimo del planeta capturar con tal de romper con su proverbial dependencia energética del golfo Pérsico, en particular con Arabia Saudita, señalado desde el 11 de septiembre por los círculos duros de la administración Bush como el "núcleo del mal".

Pese a la luz verde que le ha concedido el Congreso para intensificar la segunda fase de la guerra contra Irak, que lleva 11 años, el borrador de la resolución anglo-estadunidense en el Consejo de Seguridad se topó con los férreos obstáculos de Rusia, Francia y China, lo que ha puesto muy agitados a los estrategas bélicos de la administración Bush, lo cual se ha complicado más por el derrumbe bursátil neoyorquino, que prosigue su caída inexorable. Los encargados de la estrategia bélica de Estados Unidos se encuentran muy nerviosos y les urge derrocar al régimen de Saddam Hussein para intentar recuperar por la vía de la captura de la riqueza petrolera ajena los más de 8.4 billones de dólares que se han esfumado de Wall Street hasta ahora.

Tanto la amazona Condi Rice, encargada de la seguridad nacional, como el ultrahalconazo Donald Rumsfeld, secretario del Pentágono, han comenzado a perder los estribos con declaraciones irresponsables que no corresponden a la categoría de una superpotencia. En la página web de la revista Time del 30 de septiembre se puede encontrar una insinuación de Condi sobre lo "razonable" que debió haber sido bombardear a la URSS en 1948 por el método de la "guerra preventiva", con el objetivo de impedirle su acceso al club nuclear. Está bien que Condi crea fervientemente en la rencarnación del alma (no es broma) para renacer después de un holocausto nuclear, pero muy bien le pudiera ahorrar al género humano sus gustos y sustos de ultratumba. Por su parte, Rumsfeld mostró su impávida crueldad frente a la interrogación del senador Robert Byrd, quien lo asedió sobre los hallazgos de la revista Newsweek del 23 de septiembre, que lo desnudó cuando visitó a Hussein en 1983 y 1984 para proporcionarle equipo bélico de "uso dual", que incluía armas químicas y biológicas, con el propósito de alentar pérfidamente la guerra contra la teocracia de los ayatolas chiítas de Irán. Es decir, las armas químicas y biológicas que el mismo Rumsfeld, un vulgar mercader de la muerte, vendió al régimen de Hussein hace 19 años, sirven ahora de pretexto para derrocarlo.

Irak no posee armas nucleares y su reactor nuclear (vendido por los franceses) fue destruido por la aviación israelí en 1981. El único país de Medio Oriente que dispone de un arsenal nuclear respetable es justamente Israel, a grado tal que expertos militares colocan al Estado hebreo, desde el punto de vista cualitativo, como tercera potencia nuclear mundial, detrás de Estados Unidos y Rusia y muy por arriba, incluso, que Francia, Gran Bretaña y China (no se diga India y Pakistán). Desde luego que a Condi Rice, ex directiva de la trasnacional petrolera Chevron, no se le ocurrirá jamás bombardear a Israel en forma "preventiva" debido a su dotación nuclear, como profirió respecto a la fenecida URSS.

Nada ni nadie parece detener a la petrocracia anglosajona que busca controlar el petróleo en todos los golfos marítimos del planeta (Pérsico, de México, de Maracaibo, de Guinea, etcétera) para controlar los precios a su antojo y así someter a sus competidores Alemania, Francia, Italia, Japón, China e India, tan dependientes del oro negro. El avance de la petrocracia anglosajona ha sido más sigiloso en el golfo de Guinea y es precisamente un grupo influyente israelí, el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticos Avanzados (IASPS, por sus siglas en inglés), el que ha propuesto permutar el golfo Pérsico, donde predominan los "malos" Arabia Saudita e Irak, por el golfo de Guinea. El IASPS mantiene estrechos vínculos con Douglas Feith, tercer hombre fuerte del Pentágono, y con Richard Perle, bautizado "eminencia de las tinieblas", mandamás del controvertido Consejo de Política de Defensa, órgano consultivo del Pentágono.

Pues resulta que Paul Michael Wihbey fue entronizado como jefe del proyecto petrolero para Africa del IASPS, que contempla también incorporar el oro negro del Atlántico sur y de las costas de Brasil para conectarse con la "integración de la red energética del NAFTA" que plasmó Wihbey en un artículo inolvidable el primero de octubre del año pasado en el International Herald Tribune, en consonancia con la develación, un mes más tarde, de la entrega del petróleo mexicano en el ultrajante documento "Los nuevos horizontes", de un grupo de apátridas en el que pululan los juniors del PRI asesorados por el ITAM, "instituto" de adoctrinamiento neoliberal.

En la actualidad Africa abastece con 15 por ciento las necesidades de Estados Unidos, y se calcula que en la próxima década alcance 25 por ciento, gracias a los hallazgos de pletóricas reservas en el golfo de Guinea, que puede llegar a producir mucho más que el mar del Norte, en vías de agotamiento ("En su cortejo tranquilo a Africa, a EU le gusta la dote: el petróleo"; The New York Times, 19 de septiembre de 2002).

Entre las ventajas del petróleo del golfo de Guinea se encuentra su mayor proximidad a Estados Unidos y su más fácil logística de transporte en comparación con el mar Caspio y el golfo Pérsico. El Departamento de Estado acaba de reabrir su consulado en Guinea Ecuatorial debido a los hallazgos de las trasnacionales anglosajonas en el golfo de Guinea, y no fue gratuita la súbita preocupación del general Colin Powell, en su reciente gira africana, por dos países productores de petróleo: Gabón, anterior miembro de la OPEP, y Angola.

Bañado por el golfo de Guinea, Nigeria, que produce 2.2 de millones de barriles diarios, constituye el supremo productor de petróleo del sub-Sahara y el quinto exportador a Estados Unidos y, según Petroleum Finance Company, Angola duplicará en el próximo lustro su producción para alcanzar 2 millones de barriles diarios. La producción de Guinea Ecuatorial llegará a 350 mil barriles al día y la de Chad a 225 mil barriles diarios cuando se complete el oleoducto -a un costo de 3 mil 500 millones de dólares- que atraviesa Camerún, nación ribereña del golfo de Guinea y en cuyo proyecto participa el Banco Mundial (BM) con 500 millones de dólares, en conjunción con el operador Exxon-Mobil, para que no quede duda de qué lado danzan juntos los lobos.

Así, de acuerdo con proyecciones de analistas de la industria, la cuarta parte de todo el nuevo petróleo en los próximos cinco años, que no sea del golfo Pérsico, provendrá del sub-Sahara.

Para consolidar las inversiones, los estrategas de la petrocracia anglosajona del eje Houston-Londres desean establecer una base militar en San Tomé, isla-nación en las entrañas del golfo de Guinea, mientras busca debilitar a la OPEP.

Por azares del destino, que a veces parece jugar en sincronía con los intereses de la petrocracia anglosajona, a imagen y semejanza de otras erupciones en el Cáucaso y el golfo Pérsico, repentinamente se ha incendiado Costa de Marfil, país con costa en el golfo de Guinea y que sin ser un productor petrolero tiene un posición estratégica en la encrucijada de la red de integración energética de Africa occidental. Antes de "integrar" hay que "desintegrar", como reza el apotegma de la balcanización geopolítica. Como una nueva escenografía montada súbitamente, Costa de Marfil se acaba de incendiar con un golpe de Estado propiciado por "rebeldes" fantasmagóricos dirigidos por mercenarios ambulantes británicos ("El misterio rebelde"; BBC, 27 de septiembre de 2002), lo cual obliga a rememorar un artículo indeleble dedicado a Africa occidental ("La anarquía que viene"; Atlantic Monthly, febrero de 1994) del periodista israelí-estadunidense Robert Kaplan, especialista en balcanizaciones y fanático del "choque de las civilizaciones" de Samuel Huntington. ƑA qué trasnacionales petroleras servirán los muy bien pagados mercenarios de Gran Bretaña? Desde luego que llama la atención el acento británico de los "rebeldes" en un país francófono como Costa de Marfil, lo cual apunta a su procedencia etnolingüística desde Liberia o Sierra Leona. Si por sus actos los conoceréis, pronto se sabrán los nuevos proyectos de "integración de redes energéticas" en los países de Africa occidental frente al golfo de Guinea. La crisis en Costa de Marfil amenaza incendiar la región entera, lo cual afectaría a Nigeria, Burkina Fasso, Ghana y Togo.

Mucho de lo que acontezca en el golfo de Guinea se desprenderá del destino de Nigeria, potencia petrolera y el país más poblado de Africa, sometido a fuertes tensiones centrípetas de balcanización entre sus poblaciones islámica y cristiana, en otra variación sobre el mismo tema del "choque de las civilizaciones". Con el objetivo de que abandone la OPEP, Nigeria recibe presiones del IASPS, que opera no pocas veces en sincronía con la petrocracia anglosajona e incluso con la cancillería mexicana en la etapa de Castañeda Gutman (Fox acaba de realizar una visita aparentemente "extraña" a Abuja, al tiempo que se cerraba la embajada mexicana en Arabia Saudita). Pese a sus enormes ingresos petroleros, Nigeria ha entrado en moratoria de su deuda externa y el presidente Obasanjo enfrenta un juicio político en el Congreso que puede fragmentar al país.

La desintegración de Africa, previa a su captura final, es decir a una "integración a las redes energéticas" de la petrocracia anglosajona, había sido ya realizada en forma muy eficaz por las "condicionalidades" asfixiantes del Fondo Monetario Internacional y el BM, al precio de las hambrunas y las pandemias de la "globalización de enfermedades contagiosas". La "anarquía" de Africa occidental (el artículo mencionado sobre el tema impactó al ex presidente Bill Clinton), Ƒforma parte del diseño del caos geopolítico deliberado para aplicar la doctrina del "nuevo imperio unilateral" de Estados Unidos? Coincidentemente, el destino de Costa de Marfil, al borde de la balcanización entre el norte islámico y el sur cristiano, se encontraba ya predestinado en la "Anarquía que viene" del piromaníaco Kaplan, fiel seguidor de Huntington, quien también ha consagrado un libro ominoso a México, en el que enfatiza su carencia de agua en la transfrontera.