Denunció que uno de los abanderados también insultó a Roberto Alves Zague
Admite Navarro que ofendió verbalmente a Rodríguez
JORGE SEPULVEDA MARIN
El portero de Necaxa Nicolás Navarro reconoció haberse equivocado al reclamarle al árbitro Marco Antonio Rodríguez por el penal que marcó en su contra en el juego ante Morelia, pero lo que le preocupa es que en su cédula arbitral escribió "pinche ladrón", cuando en realidad "le dije pinche cagón".
La obvia diferencia que hay entre ambas frases puede ser motivo de una sanción drástica a una mínima, por lo que Navarro se mostró arrepentido del incidente, porque luego se dio cuenta que su compañero Diego Martínez sí tocó el balón con la mano, lo que no vio en el partido.
Comentó que en el mismo partido uno de los abanderados le "mentó la madre" a Zague, costumbre muy común en el futbol mexicano, confirmó Alex Aguinaga, quien sólo explicó que nunca se ha tomado lo que le dicen como algo personal, y por lo mismo no trasciende el hecho.
Al final de la práctica, el campamento de los Rayos parecía velorio. Caras largas, tristes. No hubo risas ni bromas como otras veces. Braulio Luna negó que la presente temporada en Necaxa le afecte en sus aspiraciones para estar en otro club o fuera del país, porque ahora tiene el firme y único compromiso con los Rayos, y luchará hasta el último momento para acceder a las finales.
"Este equipo es grande por tradición y por los logros que ha hecho y me siento un poco apenado por la situación que atraviesa, porque soy parte de él y de ninguna manera me voy a sentir fuera de cuadro", resumió.
Para el estratega Raúl Arias, llegó el momento de reconocer que éste ha sido el peor torneo, confirmado con una desastrosa tarde, durante los cuatro años que ha dirigido a Necaxa, porque "Morelia prácticamente nos atropelló, nos pasó por encima". Hay que aceptarlo: "estuvimos muy mal".
Repitió la idea común de que los técnicos "son hijos de sus resultados", y ahora no son buenos los suyos. Su contrato termina en diciembre y dependerá de la directiva su renovación o no, aunque adelanta que le gustaría seguir al menos un par de años más, porque cree en los ciclos y puede que el suyo con Rayos esté llegando a su fin.
Los entrevistados negaron que el fuerte golpe de 6-0 que les asestó Morelia, sea lo que necesitaba el grupo para reaccionar, aunque sí les mostró lo vulnerables que pueden ser cuando se confían demasiado.
El vicepresidente del club, Alejandro Bocardo, descartó, una vez más, cualquier posibilidad de tomar medidas severas contra jugadores o cuerpo técnico, aunque deslizó la opinión de que no es posible que hace unos meses disputaron la final y ahora no puedan funcionar a su altura.
Directiva y cuerpo técnico apuestan a que las condiciones del grupo tres les permitan, en los números, terminar como segundos y pasar directos a la liguilla o al menos alcanzarla en el repechaje.