La investigación aún no termina: vocero estadunidense
Niega Arabia Saudita haber financiado a miembros de Al Qaeda
REUTERS, AFP Y DPA
Washington, 24 de noviembre. Adel al-Jubeir, asesor de política internacional de Arabia Saudita, negó este domingo que el gobierno de su país haya enviado dinero a dos de los terroristas que participaron en los atentados del 11 de septiembre de 2000 en Estados Unidos, y aseguró que, por el contrario, Arabia Saudita está persiguiendo a la red Al Qaeda.
Jubeir, en entrevista con la cadena CNN desde Riad, señaló que las autoridades sauditas han colaborado estrechamente con la Oficina Fedeal de Investigaciones (FBI) en las pesquisas del supuesto financiamiento desde que se conocieron las primeras versiones "hace siete u ocho meses".
Según fuentes estadunidenses, una investigación del Congreso sobre los ataques del 11 de septiembre descubrió el movimiento de dinero del gobierno saudita a dos de los atacantes, Khalid al-Mihdhar y Nawaf al-Hazmi. Consultado si el gobierno saudita envió dinero a los secuestradores de aviones, al-Jubeir declaró: "No hay ninguna evidencia de eso".
El vocero del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Sean McCormack, advirtió el sábado que es muy pronto para sacar conclusiones sobre el rastreo del dinero. "Cuando hay una investigación en desarrollo, es importante no apresurar los juicios."
La revista Newsweek informó sobre el pago de unos 3 mil 500 dólares mensuales que habrían llegado a los secuestradores posiblemente por medio de dos estudiantes sauditas radicados en Estados Unidos, quienes recibieron el dinero de una cuenta a nombre de la princesa Haifa al-Faisal, esposa del embajador saudita en Washington.
Newsweek refirió que la FBI encontró sucesivos pagos a la familia de uno de los estudiantes, Omar al-Bayoumi, a partir del año 2000, y que Bayoumi entabló amistad con los atacantes varios meses antes en San Diego, California.
Influyentes senadores estadunidenses presionaron este domingo a la Casa Blanca a investigar con más profundidad el papel que pudo haber ejercido el gobierno saudita en el financiamiento de los atentados en Nueva York y Washington. El senador demócrata Bob Graham, presidente del Comité de Inteligencia del Senado, estimó en una entrevista con la cadena NBC que "deberían realizarse investigaciones más profundas para determinar la potencial implicación de un gobierno con ciertos terroristas, e incluso más, en los atentados del 11 de septiembre", sostuvo.
Por su parte, el servicio secreto de Estados Unidos habría hallado planes concretos de nuevos ataques terroristas en poder de Abdel Rahim el Nashir, supuesto miembro de Al Qaeda, detenido recientemente, afirmó este domingo el diario árabe Al-Sharq Al-Awsat.
Según el rotativo, los investigadores descubrieron en la computadora y el teléfono celular del detenido información que podría servir para impedir atentados. El Nashir, supuestamente cercano colaborador de Osama Bin Laden, era, según informaciones estadunidenses, una especie de jefe militar de Al Qaeda.