Senadores priístas y panistas coinciden en la necesidad de renegociar el capítulo agropecuario
La apertura agrícola en el TLCAN puede generar desestabilización
El legislador José Bonilla Robles acepta que se equivocaron al aprobar el tratado en 1992
Propone que el campo quede fuera del acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá
ANDREA BECERRIL
Senadores del PRI y del PAN coincidieron en la necesidad de renegociar el capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), a fin de evitar la crisis total en el campo; incluso el legislador priísta José Bonilla advirtió que la apertura total del sector a partir del próximo año podría conducir a la desestabilización social en el agro mexicano.
Por su parte, el panista Jeffrey Max Jones señaló que renegociar el capítulo agropecuario del tratado es positivo, porque obliga a hablar de la política agroalimentaria como una estrategia. ''Creo que es importante decir mejor nos retiramos, para que ellos digan mejor vamos a acercarnos.''
El senador del partido blanquiazul precisó que jurídicamente es posible pedir que se reabra el tratado comercial, pero no puede dejar de considerarse que en ese acuerdo hay ganadores y perdedores.
Necesario, homologar los subsidios
Los legisladores fueron entrevistados luego de una reunión de evaluación de los trabajos de la Conferencia América del Norte-Unión Europea sobre Agricultura (Canoea), convocada por el panista Jones, en la que se planteó la necesidad de aplicar una estrategia de homologación de subsidios a fin de atacar la desigualdad en el otorgamiento de apoyos, lo que ha propiciado diferencias abismales entre productores nacionales y extranjeros.
El senador Jones precisó que México otorga menos de 10 por ciento de subsidios a sus productores en relación con los países desarrollados, y ello es uno de los factores que tienen en crisis al agro mexicano.
A su vez, el priísta Bonilla, quien preside la Comisión de Desarrollo Rural del Senado de la República, reconoció que se equivocaron al aprobar el
TLCAN en 1992, y o se apoya más al campo o se renegocia ese tratado comercial. ''Y si en un caso dado no se puede llegar a un acuerdo, lo mejor sería que el sector agropecuario quedara fuera del tratado'', señaló.
Explicó luego que su partido votó a favor del TLCAN ''porque todos nos fuimos con el señuelo de que se podría exportar a Estados Unidos, pero lo que sucedió es que nos vinieron a ganar nuestro mercado interno y ahora se requiere de una serie de acciones para recuperar primero ese mercado y luego salir a competir'', aunque, insistió, va a ser muy difícil hacerlo con las comercializadoras internacionales que llegan y tienen todo a su favor.
El blindaje por sí solo no resuelve el problema
Bonilla Robles advirtió que no debe descartarse el peligro de que haya desestabilización social en el campo, si en enero se abre el mercado interno en materia agropecuaria.
Por ello, recalcó, es necesario renegociar el Tratado de Libre Comercio en aquellos sectores que han sido severamente dañados desde que entró en vigor ese acuerdo con Estados Unidos y Canadá. Al mismo tiempo, resaltó, se requiere la reconversión del sector agropecuario, toda vez que el blindaje recién anunciado por sí solo tampoco va a solucionar el problema para campesinos y productores.
En igual sentido se manifestó el panista Jones, quien es integrante de la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Senadores. Dijo que se requiere de una política agroalimentaria de homologación de subsidios, que permita un marco equitativo de competencia y combate a la desigualdad de apoyos entre productores nacionales y extranjeros.
De otra forma, preguntó el legislador de Acción Nacional, cómo pueden los mexicanos competir si el gobierno otorga apenas 7.5 mil millones de dólares anuales en subsidios, mientras que Estados Unidos da 92 mil millones de dólares para ese mismo fin.
Apoyo para una nueva estrategia agroalimentaria
En ese sentido, insistió, el apoyo a los productores agrícolas debe ser parte fundamental de una nueva estrategia agroalimentaria, tal como lo hacen los países de la Unión Europea.
En esa reunión estuvieron presentes productores de arroz, frijol y café, quienes hicieron notar a los senadores que el blindaje financiero debe concretarse en menos de un mes para evitar mayores lesiones al sector agroalimentario.
El presidente de la Federación Nacional de Productores de Arroz (FNPA), Alejandro Díaz, expuso la difícil situación por la que atraviesan y advirtió que si el gobierno federal no les otorga mayores respaldos habrá un sinfín de manifestaciones de campesinos en la capital del país.