Fijar posiciones y arranque de diálogo en "subtemas", primer gran avance: Gaviria
En Venezuela no hay acuerdos, pero "se empieza a trabajar una salida"
La comunidad hemisférica "respalda la institucionalidad democrática" del país sudamericano
GERARDO ARREOLA NVIADO
Caracas, 17 de diciembre. El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, anunció esta noche el mayor avance que haya logrado la mesa negociadora entre el gobierno y la oposición de Venezuela en seis semanas de trabajo: un compromiso para fijar posiciones en un texto unificado y el arranque del diálogo en varios subtemas de la agenda.
Gaviria, que actúa como facilitador del diálogo, reconoció que las partes mantienen enfoques aún distantes: el gobierno mira el presente y ve el camino como una sucesión de acuerdos progresivos, para crear un clima que favorezca una fórmula electoral constitucional; la oposición quiere un acuerdo total "que rebasa lo inmediato".
Precisó que no hay acuerdos, pero sí un momento en el que las partes "van empezando a trabajar". El anuncio del ex presidente colombiano coincidió con manifestaciones de ambos lados para acoger favorablemente la resolución de la OEA de esta madrugada, aunque con lecturas distintas.
Durante la jornada persistió la crispación social y hubo pequeños signos de distensión que contrastaron con un violento ataque opositor al ejército, que en la víspera manifestó su respaldo al presidente Hugo Chávez.
Gaviria, quien se entrevistó por la mañana con el canciller Roy Chaderton, dijo que este miércoles presentará el texto unificado que le pidieron ambas delegaciones. También relató que, en contraste con el trabajo previo de la mesa, dominado por un virtual diálogo de sordos, las partes discutieron sobre temas como un "tipo de colaboración voluntaria" que podrían pedir a los medios informativos, la forma de combatir acciones violentas y el hostigamiento social, la renovación constitucional de poderes, la conflictividad callejera, la prevención de eventuales enfrentamientos y el fortalecimiento del sistema electoral.
El secretario de la OEA señaló que incluso las partes intercambiaron textos sobre procesos electorales.
OEA: todo según el color
"Nos sentimos muy complacidos por los resultados en la OEA", declaró a la prensa el canciller Chaderton sobre la resolución del Consejo Permanente del organismo. "Se habla de respaldar ampliamente la institucionalidad democrática y constitucional de la República Bolivariana de Venezuela cuyo gobierno preside Hugo Chávez Frías".
El ministro de Relaciones Exteriores destacó el tramo de la resolución que rechaza "categóricamente cualquier intento de golpe de Estado o alteración del orden constitucional venezolano que afecte gravemente el orden democrático".
Agregó que el texto "es una señal muy positiva de la comunidad hemisférica en favor de la democracia y la legitimidad, encarnada, en el caso del Ejecutivo, en el presidente Hugo Chávez Frías, y en contra del golpismo".
Chaderton afirmó que para el gobierno venezolano es aceptable la expresión "electoral" dentro de la resolución, unida al término "constitucional" en una fórmula compatible. "Lo electoral para resolver los problemas del país es algo absolutamente constitucional".
El aparente juego de palabras encierra una disputa política: la sola palabra "electoral" se interpreta comúnmente como apoyo a la demanda opositora de elecciones inmediatas; pero la sola expresión "constitucional" suele entenderse como sinónimo de la posición oficial de aguardar el plazo de agosto próximo para realizar un referéndum revocatorio, de acuerdo con la Constitución.
El presidente de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) y uno de los líderes de la opositora Coordinadora Democrática, Carlos Ortega, también enfocó la parte de la resolución que respalda "la institucionalidad y constitucionalidad" del país, así como el "respaldo inequívoco a la gestión de facilitador" del secretario general de la OEA, César Gaviria.
Ortega omitió referirse al tramo del acuerdo que menciona a Chávez como presidente, pero dijo que la oposición "siempre ha encaminado acciones de lucha contra el régimen por senderos de paz, civismo y respeto a la Constitución y las leyes".
El lider sindical tomó las referencias del acuerdo a la Carta Democrática regional para instar a la OEA a que verifique si esos supuestos están presentes en Venezuela. "ƑEs esto democracia?"
En su diaria conferencia de prensa, Ortega pasó de inmediato del tema de la OEA al respaldo militar a Chávez, que manifestó el lunes el comandante del ejército, Julio García Montoya.
"Rompiendo el espíritu institucional de la Fuerza Armada Nacional", sostuvo Ortega, el ejército "se parcializa totalmente con un discurso totalmente en favor del partido del gobierno. Deja de ser una institución de carácter eminentemente profesional y al servicio de la nación" (...) y en cambio es "un insulto a la confianza democrática de las grandes mayorías".
Ortega afirmó que en el ejército se han producido ascensos basados en criterios de ideología, con los que el alto mando "se hace cómplice y pretende arrastrar" al arma.
Homenaje y tensión ante Bolívar
El paro de labores antichavista, que alcanzó 16 días de cumplirse en forma parcial pero notoria, tuvo hoy un margen de distensión al conmemorarse el 172 aniversario de la muerte del héroe nacional Simón Bolívar. Por la mañana Chávez encabezó la tradicional ceremonia oficial ante el mausoleo que recuerda al prócer, en el Panteón Nacional, y depositó una ofrenda floral. Los discursos sólo fueron textos históricos.
Por la tarde, miles de opositores que intentaban realizar su propio homenaje al héroe, marcharon hacia el panteón, donde cientos de oficialistas habían tomado posiciones con ánimo de impedir el paso a la columna.
La Policía Metropolitana, la policía de Caracas y la Guardia Nacional trazaron líneas de separación cerca del sitio donde pudieron haberse encontrado ambos grupos frente a frente. Los alcaldes opositores Leopoldo López, del municipio conurbado de Chacao y Enrique Capriles, del vecino de Baruta, se movilizaron para negociar con los jefes de los uniformados una salida pacífica a la situación.
La alternativa fue que la marcha opositora pudo avanzar hasta un punto a unos 200 metros del panteón, de donde se desprendió una comisión de una veintena de sus líderes, que llegaron al mausoleo a Bolívar y depositaron su ofrenda. Mientras tanto, los oficialistas fueron mantenidos a raya.
La columna antichavista fue contenida por una sólida barrera de la Policía Metropolitana, con los brazos fuertemente entrelazados. Los gobiernistas quedaron detrás de una línea de la Guardia Nacional y la comisión que pasó al mausoleo caminó resguardada por un destacamento femenino de la policía de Caracas. El desenlace ocurrió cuando ya la tenue luz natural se confundía con el alumbrado público, y los gritos y gesticulaciones incesantes de los dos bandos avivaban el calor de la tarde y animaban las respectivas retiradas.