La oposición retira demanda de renuncia del mandatario; solicita comicios anticipados

El gobierno de Chávez pide cesar la huelga para facilitar solución

Las partes cruzan mensajes públicos; esbozan fórmulas de salida a la crisis en Venezuela

El paro ha dejado pérdidas por más de mil 300 millones de dólares sólo en el sector petrolero

GERARDO ARREOLA ENVIADO

Caracas, 25 de diciembre. Entre la Nochebuena y el día de Navidad, los dos polos antagónicos de la crisis en Venezuela intercambiaron mensajes públicos que dibujan eventuales fórmulas de solución a la crisis: el gobierno del presidente Hugo Chávez pidió a la oposición que facilite una salida pactada, levantando el paro, mientras el antichavismo retiró la demanda de renuncia inmediata del mandatario, pero propuso concertar una elección a plazo fijo a cambio de llamar a una reanudación de labores.

El cruce de mensajes ocurrió horas antes de que se reanuden este jueves las sesiones de la mesa de negociación y acuerdos, que facilita desde hace casi dos meses el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria.

"Nuestra mano está tendida para el diálogo y el entendimiento, pero no aceptamos debatir con una pistola en la cabeza", dijo el vicepresidente José Vicente Rangel a una concentración de partidarios del gobierno que celebró la Nochebuena en una verbena popular.

Opciones de la disidencia

Este miércoles, uno de los principales líderes de la oposición, el presidente de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), Carlos Ortega, anunció en su conferencia de prensa cotodiana que pondrá en la mesa de negociaciones dos propuestas para el gobierno: a) que si Chávez pierde el referéndum consultivo convocado para el próximo 2 de febrero, convoque a elecciones generales en un plazo máximo de 30 días, o b) que se fije en la mesa la convocatoria a elecciones generales en el primer trimestre de 2003.

En cualquiera de los casos, el acuerdo implicaría el levantamiento del paro, expresó Ortega, quien omitió hablar de la renuncia del mandatario.

En tanto, en su intervención, Rangel había trazado otra frontera para cualquier salida pactada: "la base del diálogo y el entendimiento está en el reconocimiento a los más débiles. No puede haber diálogo cuando se pisotea a los pobres como se hacía antes aquí. Este es un gobierno para las mayorías nacionales, no para las minorías privilegiadas".

-šMano dura! -gritó al vicepresidente un activista situado en las primeras filas.

-Esa mano dura que tú dices es compatible con el ejercicio de la ley -replicó Rangel-. En Venezuela no hay un solo preso político, un solo torturado, un solo perseguido, un solo medio de comunicación clausurado.

"Tengan la seguridad de que Venezuela, bajo la conducción de Hugo Chávez, no se saldrá de la senda democrática, jamás se saldrá de la senda de la Constitución."

Insistiendo en un mensaje que se ha hecho consistente en las esferas oficiales, respecto a la existencia de un sector dialogante dentro del antichavismo, el vicepresidente instó "a la oposición racional y democrática a que entienda que la ley y la Constitución tienen que ser respetadas por todos, y si aquí se eligió a Hugo Chávez como presidente, hay que respetar el periodo constitucional de Hugo Chávez".

Aunque son aún muy distantes, el intercambio de mensajes es el primer indicio de que las posiciones no sólo se han movido, sino que están esbozando opciones, al cabo de 24 días de paro parcial de labores.

Tras el discurso, el vicepresidente confirmó a reporteros la percepción gubernamental de que la huelga va cediendo.

"La línea del paro y todo este mensaje histérico e irresponsable se va a revertir", señaló Rangel. "Esos sectores irresponsables prometieron a la sociedad la caída del presidente Chávez, prometieron un espejismo. Ahora lo más difícil de la situación ya pasó, ya arrancamos, ya empieza a funcionar el aparato".

Pero insistió en que el gobierno se abraza a la legalidad: "la ley es lo más duro que tiene el estado de derecho, la ley es firmeza, es dureza, el pueblo entiende así la dureza, en términos legales".

El paro ha causado pérdidas de más de mil 300 millones de dólares sólo en el sector petrolero, informó el presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Alí Rodríguez. Agregó que las autoridades esperan reanudar lentamente las operaciones de la corporación, luego de que militares y técnicos leales al gobierno están recuperando el control de la industria, aunque los venezolanos siguen formando filas de hasta seis horas para cargar gasolina en sus vehículos.

La oposición había rechazado una tregua navideña propuesta por Rangel; en cambio, llamó a mantener el activismo político durante los festejos decembrinos y a continuar el movimiento.

"Aquí estamos en las calles y aquí nos quedamos", advirtió Ortega el martes. "En nuestro caso hablar de tregua es hablar de elecciones ya".

Los partidos oficialistas celebraron la Navidad con una fiesta popular en la plaza de La Campiña, frente a la sede principal de PDVSA. La oposición realizó una misa ecuménica al aire libre y un cacerolazo a la medianoche.

Ajustes en PVDSA

El presidente de PDVSA declaró que la empresa estatal realizará "fuertes ajustes" en sus costos para remontar las pérdidas originadas por el paro, que seguirán los despidos en los altos niveles gerenciales y que se aplicará un plan de racionalización de gastos.

"El año próximo tendremos una nueva PDVSA", abundó. Precisó que además de los despidos, algunos de los paristas serán llevados ante tribunales con cargos penales, pues "están fuera de la ley, son delincuentes comunes y corrientes; no habrá manera de que justifiquen y convenzan al pueblo de que esto obedece a un problema de conciencia o al ejercicio de un derecho ciudadano, porque ninguna ley, en ninguna Constitución, se puede argumentar que el ejercicio de un derecho ciudadano afecte al resto de la población".

Rodríguez advirtió que durante el primer trimestre del año próximo habrá una fuerte presión al presupuesto nacional, que afectará el pago de salarios a maestros del nivel básico, medio y universitario, así como a un amplio sector de empleados públicos, cuyos ingresos dependen de la factura petrolera.

Las pérdidas reportadas por el paro representan más de la mitad de las ganancias netas estimadas por la empresa para este año, de 2 mil millones de dólares, a la vez que un retroceso de casi la mitad respecto a los beneficios de 2001, de 3 mil 993 millones de dólares.

El alcalde del municipio Libertador, que corresponde al centro histórico de Caracas, el oficialista Freddy Bernal, informó a su vez que el gobierno ha destinado unos 10 mil millones de bolívares (unos 8 millones de dólares) para la importación de alimentos desde países del Caribe y del resto de América Latina.