Polémica por la asistencia de Lula a Davos
El Foro Social Mundial de Porto Alegre, contra el ALCA y la guerra
AFP, DPA Y PL
Porto Alegre, 20 de enero. La creación del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA), patrocinada por Estados Unidos, y los planes de guerra de Washington contra Irak serán los principales blancos de los movimientos y grupos que se oponen a la globalización neoliberal que se reúnen a partir de esta semana en Porto Alegre en el tercer Foro Social Mundial, al cual asistirá como invitado el presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, aunque el ex obrero metalúrgico y líder izquierdista ha despertado polémica por su decisión de asistir, junto con algunos de sus ministros, a la reunión de Davos también.
Precisamente, el Foro Social Mundial (FSM) fue creado en 2001 como alternativa al Foro Económico Mundial de Davos, celebrado también del 23 al 28 de enero, en Suiza, y considerado la gran plataforma del neoliberalismo.
"El FSM ya no puede ser considerado un evento marginal; más y más gente está teniendo que reconocer que representa la tendencia del futuro", dijo la activista Susan George, cuando se espera que unas cien mil personas se hagan presentes en la ciudad brasileña a partir del jueves.
Según organizadores, este tercer encuentro apunta a la elaboración de estrategias de acción concreta, mientras muchos organismos se disponen a apuntar contra los intentos de Estados Unidos de imponer el ALCA, al que califican de "recolonización", y de declarar la guerra a Irak.
Asimismo, eliminar "una deuda externa que aplasta a los países pobres y el privilegio del mercado como lógica que estructura a las sociedades", afirmó Sergio Haddad, presidente de la Asociación Brasileña de las ONG y organizador del encuentro.
Unos mil 300 millones de personas viven con menos de un dólar diario, mientras las 10 mayores fortunas del mundo tienen un patrimonio de 133 mil millones de dólares, según datos del foro.
Los asistentes también reclaman que se controle el movimiento de capitales financieros, un nuevo orden respetuoso del ambiente, pugnan por la soberanía alimentaria y buscan movilizar a la opinión pública en favor del acceso a medicamentos para todos, en momentos en que los poderosos laboratorios esgrimen sus patentes para impedir la fabricación de "genéricos" ante crisis sanitarias graves.
El presidente brasileño será el más simbólico invitado del FSM. "En Davos discuten cómo acumular más riqueza, nosotros (en el Foro Social), cómo distribuirla mejor", aseguró Lula el año pasado, cuando aún no era presidente.
Entre los activistas antiglobalización la asistencia de Lula ha provocado críticas: "Lula, no vayas a Davos", le ha escrito el sociólogo Emir Sader en una carta acogida y divulgada por el Movimiento de los Sin Tierra. En cambio su compatriota y líder campesino, José Bové, fue uno de los pocos no críticos: "el hecho de que vaya a reunirse con los más poderosos del planeta para decirles lo que piensa, no me molesta", afirmó.
