Washington y Londres desestiman el pacto; Bagdad
sólo responde a las presiones: Powell
Se compromete Irak con la ONU a apoyar más a
los inspectores de armas
Desmiente ministro versiones de que Hussein se vaya
a exiliar; "son estupideces"
AFP, REUTERS Y DPA
Bagdad, 20 de enero. Los inspectores de la Organización
de Naciones Unidas (ONU) llegaron hoy a un acuerdo de 10 puntos con Irak
en el que éste se compromete a cooperar más para demostrar
que no posee armas de destrucción masiva, en un anuncio desestimado
por Washington y Londres.
El acuerdo fue firmado tras una visita de 24 horas a Bagdad
de los responsables de los inspectores: Hans Blix, director ejecutivo de
la Comisión de Control de Verificación y de Inspección
de la ONU (Unmovic), y Mohamed El Baradei, jefe de la Agencia Internacional
de Energía Atómica (AIEA).
En
el documento, Irak se compromete a permitir a los inspectores un "acceso
a todos los lugares, incluidas las casas privadas, a alentar a los científicos
iraquíes a que acepten ser interrogados en privado y a proporcionar
a la ONU una lista completa de los científicos que participaron
en los diferentes ámbitos de armamento". Irak también anunció
la formación de una comisión para investigar el reciente
hallazgo de ojivas químicas vacías y verificar si hay más
en sus depósitos.
La semana pasada, el descubrimiento de una decena de ojivas
vacías que no fueron declaradas por el régimen de Saddam
Hussein en su inventario de armamento presentado a la ONU aumentó
la tensión entre el organismo mundial y Bagdad.
Irak garantizó a Blix y a El Baradei su voluntad
de facilitar el trabajo de los inspectores y cooperar al máximo
con ellos, declaró el vicepresidente Taha Yassin Ramadan, uno de
los más reticentes miembros del gobierno iraquí ante las
inspecciones de la ONU.
El jefe de la diplomacia estadunidense, Colin Powell afirmó
que el acuerdo "sigue siendo más o menos la misma cosa. Irak sólo
responde a las presiones". Destacó que Bagdad tiene "la obligación
de entregar a los inspectores toda la información que necesiten".
A su vez, el canciller británico, Jack Straw, señaló
que "Irak debe poner fin a este juego del gato y el ratón".
Antes de abandonar Bagdad, Blix reiteró que quiere
"un proceso de inspección eficaz y creíble. Avanzamos mucho
en este sentido, pero hubo obstáculos en el camino y algunas de
estas dificultades fueron resueltas hoy", afirmó durante una conferencia
de prensa en el Canal Hotel, sede de la ONU en Bagdad.
"En cuanto a los asuntos sustanciales relacionados con
el ántrax, el VX (gas nervioso) y cierto número de misiles
Scud, no hemos discutido aún. Esto se hará en algún
momento en el futuro", informó Blix.
Posteriormente, el jefe de la Unmovic declaró en
Atenas que Bagdad se negó a permitir vuelos de reconocimiento de
naves U-2 sobre su territorio para ayudar a los inspectores. "No logramos
un acuerdo de Irak para el vuelo de aviones U-2. Pusieron un elevado número
de condiciones que son inaceptables para nosotros", señaló.
Irak quiere que los aviones sean acompañados por
sus propias aeronaves, pero indicó que no podrían hacerlo
si los inspectores de armas vuelan al norte y el sur del país, donde
se mantienen las zonas de exclusión aérea impuestas de manera
unilateral por Estados Unidos y Gran Bretaña y sin el consentimieno
de la ONU desde 1991.
En Bagdad, Amir al-Saadi, al más alto asesor científico
de Hussein, señaló que los vuelos británicos y estadunidenses
en las zonas de exclusión deben cesar para que Irak permita a los
inspectores de armas utilizar aviones U-2. "No podemos ser responsables
por la seguridad del avión de la ONU y por su tripulación",
declaró Saadi.
Por su parte, El Baradei, se mostró optimista respecto
a que se pueda evitar una guerra contra Irak, aunque señaló
que aún no hay pruebas suficientes de que verdaderamente coopere.
"No decimos que Irak sea culpable. Pero todavía no hay pruebas suficientes
para que le podamos decir al Consejo de Seguridad que el acta (Irak) puede
ser cerrada", especificó en Atenas.
Mientras, Mohammad Said al-Sahhaf, ministro de Información
iraquí, desmintió categóricamente la posibilidad de
que el presidente Hussein decida exiliarse, en declaraciones hechas la
noche del domingo en Jartum. "Las informaciones sobre la partida del presidente
Hussein de Bagdad sólo son estupideces", declaró el ministro
a los periodistas al salir de una entrevista con el presidente sudanés,
Omar al-Bechir.
Sahhaf indicó haber entregado al presidente sudanés
un mensaje verbal de su homólogo iraquí, refiriéndose
a "la relaciones entre Irak y el Consejo de Seguridad de la ONU".