"No vamos a torcer nuestro proyecto" en favor de ningún candidato, afirma

El GDF, ajeno a las campañas electorales, dice López Obrador

Pide sustentar con pruebas las acusaciones sobre uso de recursos públicos en actividades de proselitismo Llama a los actores políticos a estar unidos para defender la economía nacional

ELIA BALTAZAR

El jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, aseguró ayer que su administración no intervendrá en los procesos electorales, y mucho menos para favorecer a algún partido o candidato, y pidió que las acusaciones sobre uso de recursos públicos para fines proselitistas se sustenten con pruebas y se presente denuncia ante la instancia correspondiente, pues de otro modo "pierden efectividad".

En su conferencia de prensa matutina, López Obrador insistió en que su gobierno de ninguna manera incurrirá en prácticas del pasado -cuando se utilizaban los recursos públicos para actividades proselitistas-, no sólo por respeto a la legalidad, sino por convicciones y principios.

"No podemos hacer en el gobierno lo que criticábamos como oposición, pues si caemos en lo mismo perdemos autoridad y congruencia", dijo. Agregó que el proceso electoral no debe significar mayor problema si los actores políticos cumplen con su responsabilidad. Y si hay quien actúa de manera ilegal, aseveró, hay una fiscalía para delitos electorales que investiga y castiga las irregularidades.

Insistió en la necesidad de respaldar las acusaciones con pruebas, aunque "no nos debe extrañar que haya acusaciones sin sustento, pues son parte de la temporada".

Advirtió que en su gobierno ningún funcionario puede utilizar recursos o bienes públicos para actividades proselitistas y mucho menos ofrecer los programas a cambio de apoyo partidista, porque "no vamos a torcer nuestro proyecto por ningún candidato o puesto de elección".

Además, el jefe de Gobierno salió en defensa de la procuradora social, Patricia Ruiz Anchondo, a quien se menciona como candidata a jefa delegacional de Coyoacán. "No hay nada que le impida participar, pero no está utilizando recursos que tiene a su cargo", sostuvo.

El mandatario capitalino encabezó ayer la primera entrega de microcréditos del año, en una ceremonia que se llevó a cabo en el Zócalo, donde afirmó que este programa no es una "gracia", sino un derecho de los ciudadanos que con sus impuestos conforman el presupuesto de la ciudad. La responsabilidad del gobierno, dijo, es administrar bien los recursos para procurar justicia y desarrollo y mejorar las condiciones de vida de la gente.

Por su parte, la secretaria de Desarrollo Social, Jenny Saltiel, enfatizó que el programa de microcréditos ha significado para la población más humilde del Distrito Federal la posibilidad de elevar su calidad de vida. Refirió que un estudio de la UNAM mostró que los microcréditos han ayudado a los beneficiarios -principalmente mujeres- a incrementar su ingreso y mejorar su alimentación.

En la mañana, López Obrador también hizo un llamado a los actores políticos del país para "estar unidos" y "no trastocar" la economía nacional por encima del contexto político electoral.

"Tenemos que hacer un esfuerzo y estar preocupados básicamente porque no se agrave la situación económica del país, pues de eso depende todo lo demás". A propósito de las circunstancias electorales, López Obrador aclaró: "puede haber mucho ruido por las campañas políticas, una lucha legítima en los partidos y entre éstos por los cargos, pero todo eso lo resiste la población y no altera en lo sustancial la marcha del país".

En cambio, "lo que sí afecta es que se agrave la situación económica". Por eso, "hay que saber lo que realmente es importante".

Frente a esa perspectiva, el jefe de Gobierno recomendó "estar unidos para fortalecer la economía frente a los factores externos, para que no tengamos un problema de debilitamiento, de devaluación del peso respecto del dólar".