Los cuerpos fueron hallados en estado de descomposición en el poblado Bay Town

Mueren tres mexicanos dentro de un vagón de tren cerca de Houston

ELENA VEGA ESPECIAL PARA LA JORNADA

Houston, 3 de junio. A sólo tres semanas de la muerte de 18 inmigrantes en Texas, este martes tres mexicanos más se unieron a la lista de los trabajadores que fallecen tras cruzar la frontera hacia Estados Unidos.

En el poblado Bay Town, situado a unos 45 minutos al este de Houston, las autoridades descubrieron este martes los cuerpos de tres inmigrantes mexicanos que fallecieron dentro de un vagón de tren de la línea Pacific Union, luego de permanecer en su interior por tres días bajo temperaturas de extremo calor y sin ventilación.

Los cadáveres de los tres mexicanos, en estado de descomposición, fueron encontrados luego de que un sobreviviente que logró escapar del vagón buscó ayuda para rescatar a sus compañeros.

Angeles Gómez, agregada de prensa del consulado general de México en Austin, dijo a La Jornada que de acuerdo con la información proporcionada por uno de los sobrevivientes, un grupo de cinco o seis personas abordaron un vagón vacío del tren cerca de Eagle Pass. El tren de Pacific Union, que se utiliza para transportar granos, había iniciado su viaje en Los Angeles.

''El viernes, alrededor de las 2 de la tarde, se introdujeron estos inmigrantes a una tolva granelera, que es un contenedor para granos que tiene forma de V'', explicó Gómez. Los indocumentados se introdujeron al vagón por el techo, donde hay orificios con tapas de metal que se utilizan para llenar y descargar este tipo de carros.

Gómez explicó que la única fuente de ventilación con la que contaba el grupo adentro del vagón era un pequeño orificio ubicado en una de las esquinas del carro. Indicó que con el movimiento del tren entraba un poco de aire a través de esta rendija. Luego de unas seis horas de trayecto, según el testimonio de uno de los sobrevivientes, el tren se detuvo. Para entonces, dijo Gómez, las víctimas estaban inconscientes.

''Los sobrevivientes trataron de salir arrojando una pequeña maleta para levantar la tapa. Tardaron mucho tiempo en hacerlo, pero finalmente lo lograron'', dijo.

Los inmigrantes fabricaron entonces una cuerda con las camisas y con la ropa que llevaban puesta y lograron salir del vagón la mañana del sábado, después de toda una noche de intentos. ''Las planchas del contenedor, las paredes, estaban muy calientes; no podían subirse porque estaban ardiendo. Les costó muchísimo trabajo salir'', explicó.

Los sobrevivientes escaparon del vagón en la población La Coste, Texas, ubicada al sur de San Antonio, y se dirigieron a la carretera interestatal en donde lograron que un conductor los llevara hasta Austin. El domingo, acudieron a la iglesia Cristo Rey, en Austin, donde se reunieron con el sacerdote Jaime Matías, a quien narraron lo sucedido.

''El padre nos contactó el lunes temprano e inmediatamente avisamos a las autoridades de Union Pacific y les dimos la información para que localizaran los cuerpos. Esta mañana nos hablaron para decirnos que ya los habían localizado'', dijo. De acuerdo con las autoridades, los sobrevivientes dejaron la cuerda elaborada con ropa colgada afuera del vagón para identificarlo. Gómez explicó que sobrevivieron dos o tres inmigrantes, pero dijo que la cifra exacta y las identidades de las víctimas y de las personas vivas todavía no se determinan. La vocera del consulado explicó que hasta el momento no existe evidencia de que un traficante de indocumentados o coyote haya estado involucrado en el incidente que causó la muerte a los tres connacionales.

Por su parte, Luisa Aquino, portavoz de la Oficina de Ciudadanía y Servicios Migratorios, dijo a La Jornada que se está recopilando información con las autoridades locales, estatales, federales y con el consulado de México, para iniciar una investigación sobre el caso.

Finalmente, en Houston, el gobernador de Texas, Rick Perry, lamentó el incidente y agregó que las autoridades estadunidenses ''utilizarán todo el poder que tienen para enviar un mensaje fuerte y firme a los individuos que transportan a inmigrantes; no vamos a aceptar esto y vamos a usar nuestra ley para castigarlos de la máxima manera. Nuestros corazones están con estos individuos y con sus familias, que obviamente se encuentran en una situación muy triste'', dijo en conferencia de prensa.