México D.F. Lunes 16 de junio de 2003
RUMBO AL 6 DE JULIO
El abstencionismo, enorme reto a vencer, sostiene
No hacer negocios de familia, demanda Rivera
a partidos
El arzobispo primado califica de ''pálidas''
las campañas
ANGELICA ENCISO L.
Frente al proceso electoral de los próximos días,
el cardenal Norberto Rivera Carrera sostuvo que las campañas de
los partidos políticos son ''muy pálidas'' en cuanto a visiones
y programas de amplio alcance, que el abstencionismo es un ''enorme reto
a vencer'' y que se debe poner un alto a la práctica de hacer de
los institutos políticos ''buenos negocios de familia'' con ganancias
extras por uso ilegal de recursos.
Aseguró que sigue pendiente el ''cambio'' y que
si bien los partidos son importantes, no son los únicos responsables
de la construcción del país; también las iglesias
tienen un lugar y una responsabilidad, ''porque es tarea que ha de cumplir
todo ciudadano, afiliado o no, a una institución política,
con o sin religión''.
En un artículo publicado en la edición de
mayo de la revista política Voz y voto, que fue distribuido
ayer por personal de prensa del arzobispado durante la homilía dominical
en la Catedral Metropolitana, Rivera Carrera admitió que los pastores
de la Iglesia no habrán de hablar a favor ni en contra de ningún
candidato, porque ''su servicio y autoridad han de estar en otro nivel''.
En
el texto denominado Desafío de los partidos, destacó
que a pesar de que desde hace mucho el pueblo ''desea un cambio que lo
beneficie integralmente, las condiciones y oportunidades para que éste
suceda y se consolide han resultado limitadas y escasas. No parecen suficientes
hasta ahora la disposición y el esfuerzo de los partidos para colaborar
en un proyecto al servicio de la nación... los mayores intereses
parecen reducirse más bien al ámbito de los intereses partidistas'',
indicó el arzobispo en el apartado Los procesos electorales de
2003.
Aseguró que es necesario madurar en la ''concepción
y práctica de la oposición'' para que sea búsqueda
inteligente y propositiva de caminos, acuerdos y soluciones a los grandes
problemas de la nación. ''Un país, por más oportunidades
que se le presenten, no puede posponer indefinidamente las decisiones ni
conformarse con soluciones parciales, insatisfactorias e ineficientes'',
indicó.
El Instituto Federal Electoral ''ha debido afrontar no
pocos retos para salvaguardar la legalidad de los procesos electorales,
en que por momentos parece que algunos partidos actuaron en los límites''.
Consideró que hay prácticas viejas que se
resisten a desaparecer, por lo que ''se requiere seguir trabajando denodadamente
para que la selección de los candidatos sea cada vez más
regular y transparente, para que terminen por desaparecer los acarreos,
la compra de votos, las urnas engordadas, los conflictos poselectorales,
los chantajes disfrazados de grupos corporativos que giran en torno a los
partidos''.
Además, el abstencionismo es un reto a vencer y
es momento de cambiar el voto ''de castigo'', en el que la ''emotividad''
prevalece, por el voto ''propositivo''. Las campañas han abundado
en insultos y descalificaciones, consideró el religioso.
''En un país como México, donde hay tanta
pobreza, no puede seguir creciendo el presupuesto destinado a los procesos
electorales, que ya alcanza cifras exorbitantes. También ha de encontrarse
pronto una regulación para que, salvaguardada la posibilidad de
nuevos partidos, se ponga un alto a la práctica de convertir estas
opciones en buenos negocios de familia, con ganancias adicionales por el
uso ilegal de los recursos'', dijo.
Indicó que la publicidad partidista ha saturado
los espacios públicos y ''se ha sumado así a la prepotencia
incontenible que nos agobia con la contaminación visual en ciudades
y caminos''.
Precisó que en nada beneficia a la credibilidad
y confianza de los partidos políticos el desprecio hacia los acuerdos
y las leyes de convivencia civilizada, así como tampoco aporta nada
que los funcionarios abandonen a medias los programas y responsabilidades
con que se comprometieron, cuando fueron elegidos para contender por otros
puestos.
Y se preguntó si serán creíbles propuestas
de candidatos que de la noche a la mañana cambian de partido y de
programas, por no haber sido seleccionados en el bando donde militaban.
''Las convicciones que cambian la vida de un país no son como las
etiquetas que pueden colocarse en una camiseta o en otra, sin la menor
crisis de conciencia. Ni tampoco las que buscan alianzas ofreciéndose
al mejor postor.''
Sostuvo que hay tareas comunes y urgentes que cumplir,
como defender la vida en todas sus manifestaciones, luchar contra toda
forma de corrupción, proponer líderes imitables a los ciudadanos
y reconstruir el liderazgo social y político.
Si se me aparece el diablo... soy exorcista: Onésimo
Cepeda
El obispo de Ecatepec, Onésimo Cepeda, consideró
que si algunos párrocos u obispos han apoyado a candidatos o a partidos
políticos desde el púlpito, abiertamente, debe aplicárseles
la ley, ''pero antes se les debe de comprobar'' que hayan incurrido en
tales actividades.
''Ayer un periodista me decía que ya nos había
amenazado (Santiago) Creel (secretario de Gobernación) que se nos
iba a aparecer el diablo; lo que dije es que no se le olvide que yo soy
exorcista. O es que el diablo me viene a ver y se va al paso. Soy exorcista
y le digo que se vaya, que se vaya a ondear gatos de la cola y a mí
que me deje tranquilo'', dijo el prelado, entrevistado al término
de su homilía dominical.
Según Cepeda, los obispos están dispuestos
a cumplir con la ley, ''pero que se aplique pareja'', pues a su ver han
existido denuncias contra otras religiones a las que no se les ha aplicado.
En este punto coincidió el obispo de León, José Guadalupe
Martín Rábago, quien indicó que la petición
del gobierno federal a la Iglesia católica de mantenerse al margen
de las declaraciones políticas en pleno proceso electoral debe atenderse
con equidad, ''todos parejos''.
El también vicepresidente de la Conferencia del
Episcopado Mexicano, entrevistado al final de un servicio religioso en
la Catedral Basílica de León, recordó que el Código
Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) no prohíbe
a líderes religiosos manifestarse sobre las ofertas de candidatos
a la feligresía, y negó que esa opinión sea en pro
o en contra de partido alguno.
Entre tanto, el obispo de San Cristóbal de las
Casas, Felipe Arizmedi, exhortó a todos los ciudadanos a votar el
próximo 6 de julio y a que ''hagan hasta lo imposible por superar
el abstencionismo'', aunque reiteró su sugerencia de que ''se fijen
por qué candidatos'' sufragan.
En entrevista colectiva sostuvo que se debe votar por
quienes ''puedan ser buenos legisladores para que se mejoren las leyes
y favorezcan más a los niños, incluso a los no nacidos''.
(CON INFORMACION DE JAVIER SALINAS, ELIO HENRIQUEZ
Y MARTIN DIEGO, CORRESPONSALES)
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