El gobierno destinará a bancos en lo que resta del sexenio $295 mil 950 millones

El monto por pagarés Fobaproa rebasa el gasto para el campo

La cifra equivale al presupuesto otorgado a educación Según Moody's, con los recursos que recibirá la banca aumentará su liquidez y servirá para transformar y modernizar al sistema financiero

ROBERTO GONZALEZ AMADOR Y ANTONIO CASTELLANOS

Al margen de la disputa sobre la legalidad de algunas operaciones del rescate bancario, el gobierno federal deberá destinar en lo que resta de la actual administración recursos por 295 mil 950 millones de pesos para hacer frente a los vencimientos de los pagarés emitidos a favor de instituciones financieras durante la crisis de 1995, cantidad equivalente al gasto público anual en educación y rebasa el presupuesto destinado al campo, de acuerdo con un nuevo reporte de la agencia calificadora Moody's.

El vencimiento de los pagarés del rescate bancario, que para el gobierno federal creará el problema de buscar los recursos para pagar la deuda a las instituciones financieras involucradas, representará para éstas un importante monto de liquidez que, de acuerdo con Moody's, "va a transformar y a modernizar el sistema financiero".

Un análisis difundido ayer por Moody's, elaborado por sus analistas Phil Guarco y Alonso Galván, estableció que los recursos que los bancos mexicanos esperan recibir del gobierno al vencimiento de los pagarés emitidos durante el rescate financiero de 1995 pueden impulsar el crecimiento de los préstamos a empresas y particulares.

"Los bancos contarán con los fondos para hacer más préstamos al sector privado; junto con los recursos del sistema privado de pensiones -las administradoras de fondos para el retiro (Afore)-, este flujo de nueva liquidez puede impulsar al mercado mexicano de capitales y al sistema bancario a una transformación y modernización".

Entre 1995 y 1996, el gobierno del entonces presidente Ernesto Zedillo tomó al margen del Congreso la decisión de comprometer recursos públicos en diferentes programas orientados a evitar la quiebra del sistema bancario, luego de que la devaluación de diciembre de 1994 elevó a tal grado las tasas de interés que se originó una cascada de incumplimiento en el pago de créditos. Según investigaciones posteriores, tanto en el Congreso como en círculos independientes, los entonces propietarios de la banca incluyeron en las operaciones de salvamento financiero créditos irregulares e incluso autopréstamos.

El gobierno del presidente Zedillo, a través del Fondo Bancario de Protección al Ahorro, asumió la responsabilidad de créditos otorgados por los bancos, además de que estableció un programa de capitalización de las instituciones para evitar su quiebra. Para ello, emitió pagarés a favor de los bancos, que forman parte de los activos de esas instituciones, cuyo vencimiento comenzó en 2002 y finalizará en 2015.

El reporte de Moody's indicó que los pagos del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), que asumió las obligaciones del Fobaproa, derivados del vencimiento de esos pagarés, alcanzaron 6 mil 730 millones de pesos en 2002, pero la cifra aumentó este año a 29 mil 520 millones de pesos; será de 13 mil 100 millones de pesos en 2004 y, en 2005, aumentará hasta 176 mil 200 millones, para situarse en 77 mil 130 millones de pesos en 2006, último año de la administración del presidente Vicente Fox.

Entre 2003 y 2006, el vencimiento de los pagarés de rescate bancario alcanzará la suma de 295 mil 950 millones de pesos, cantidad que cubre exclusivamente el principal de la deuda, además de los intereses correspondientes. La mayor parte de esos instrumentos genera a los bancos un interés equivalente a la tasa de interés interbancaria de equilibrio (TIIE) o a la de los Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes).

De acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda, entre 1995 y 2002, el gobierno federal ha destinado 274 mil 96.7 millones de pesos para pagar a los bancos los intereses derivados de las operaciones de saneamiento financiero. Esta cantidad es prácticamente similar a los 295 mil 950 millones de pesos que la actual administración deberá cubrir entre 2003 y 2006 para hacer frente al vencimiento de los pagarés.

El monto de recursos que requerirá la liquidación de los pagarés entre 2003 y 2006 es ligeramente superior a los 273 mil 200 millones de pesos que destina cada año el gobierno federal a la educación y es 157 por ciento mayor al presupuesto público canalizado al campo, que este último año alcanza 115 mil millones de pesos, de acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

"A partir de 1995, cuando el IPAB empiece a hacer pagos significativos por el vencimiento de los pagarés, los bancos deberán tomar la decisión crítica de hacia dónde desplegar esos activos", comentó Moody's.

"Esterilizar" incremento de liquidez

La calificadora, una de las que han otorgado el llamado grado de inversión a México, dijo que es de esperar que las autoridades puedan "esterilizar" este aumento de liquidez del sistema financiero a un nivel macroeconómico. Esto es, que se creen mecanismos para evitar que ese incremento de recursos genere presiones inflacionarias.

Sin embargo, añadió, cada banco que reciba un pago se enfrentará a la decisión en cuanto a qué hacer con esa liquidez.

"En efecto, los bancos necesitarán elegir entre algunas posibilidades: sustituir esos activos del Fobaproa-IPAB por otros activos productivos, que pueden servir para incrementar los préstamos al sector privado; o intercambiar esos pagarés por otros papeles gubernamentales, que aunque generen menos ingresos tengan un nivel cero de riesgo", añadió la firma calificadora.

Estimó que la reciente ley de garantías, aprobada en el Congreso, puede ser un incentivo para que los bancos canalicen los fondos adicionales que reciban por el vencimiento de los pagarés hacia el financiamiento de actividades productivas. Esto, junto con el crecimiento en el capital disponible de las Afore, incrementará el capital de inversión disponible para el sector privado.

Los bancos que operan en México toman acciones para hacer frente al incremento de la liquidez por el vencimiento de los pagarés Fobaproa. El lunes pasado, la Asociación de Banqueros de México anunció que las instituciones de crédito esperan colocar en los próximos 12 meses recursos por 174 mil millones de pesos a través de 580 mil préstamos.