El monólogo refleja la situación del Tercer Mundo, afirma su autora Patricia Astrada

La pluma que araña el corazón de la vida, obra teatral en torno a verdad, democracia y libertad

MARIANA NORANDI ESPECIAL

Democracia, verdad y libertad observadas desde un prisma mordaz e implacable, son algunos de los personajes que protagonizan la obra argentina La pluma que araña el corazón de la vida, monólogo político y surrealista de la dramaturga Patricia Astrada.

Este montaje, dirigido por Julio Ordano y actuado por la misma autora, se ha presentado en lugares tan diversos como el Festival Internacional de Teatro de Tánger, donde ganó el primer premio; la Casa de las Américas de La Habana; en calles de Buenos Aires ante trabajadores y piqueteros; en barrios populares de San Salvador y Honduras, o en el Auditorio Nacional de Costa Rica. Ahora, cuatro años después de su estreno, llega a México donde se está presentando en varios espacios de la ciudad.

La obra parte del recorrido de un personaje alegórico, La Verdad, en busca de su hermana, La Democracia. En su trayecto va construyendo una crítica a las instituciones y manejos políticos de nuestro tiempo buscando provocar en el espectador un acto de reflexión y cuestionamiento políticos.

Una de sus presentaciones se llevó a cabo en el Rincón Zapatista de la colonia Obrera donde, después del espectáculo, platicamos con la actriz.

-ƑCómo nace esta obra?

-A partir de unas poesías surrealistas que escribí en 1994 y que aparecen en la obra. A partir de ahí creé el texto. La acabé estrenando en junio de 1999 en Buenos Aires.

-ƑPor qué un teatro político y surrealista?

-Empecé a hacer teatro cuando acabó la dictadura en Argentina y en ese momento lo que me nacía eran cosas relacionadas con un cuestionamiento del poder. Lo surrealista es un juego porque, en el fondo, es una obra hiperrealista.

-En la obra ya aparece Kirchner como presidente de Argentina, Ƒcómo se va actualizando el texto?

-No me cuesta actualizarlo porque lo que cambian son los nombres, las actitudes de los presidentes terminan siendo siempre las mismas. Y encima, en Argentina, quedó el mismo ministro de economía.

-Pero no sólo las actitudes de los presidentes acaban siendo las mismas, sino las realidades de los países latinoamericanos.

-Más que realidades latinoamericanas, las realidades de los países del Tercer Mundo. Cuando fui a Tánger, los marroquíes me reclamaron por qué hacía hincapié en Latinoamérica cuando se trataba de un problema global y similar en todos los países. A partir de ahí cambié mi discurso y lo adapté también al a los países subdesarrolados.

-En el monólogo, La Vedad viaja por el mundo y nunca encuentra a La Democracia, Ƒexiste realmente algún país demócratico?

-Democracia representativa creo que no, porque la actual democracia está totalmente vacía de contenido. Yo creo en una democracia más directa, en una construcción de poder diferente donde la gente se haga cargo de sus problemas, busque alternativas y vehículos para acceder a un poder de manera más directa. ƑDónde hay un país absolutamente autónomo? En ninguna parte. Tal vez estemos en una etapa de transición pero, evidentemente, este diseño de democracia no representa a nada ni a nadie.

-Aunque al final de la obra se percibe cierta esperanza...

-Tengo esperanza porque, como artista, puedo expresarme y comunicar. No sería honesto decir que todo está perdido porque entonces me tendría que ir a mi casa. Si tengo ganas de subirme a un escenario, de enfrentar al público, de conmoverlo y de mostrarle una realidad con ganas de modificarla, entonces hay una esperanza.

La pluma que araña... : lunes 23 de junio, 16 horas, Auditorio Guerrero de la UAM-Xochimilco. Días 24, 25 y 26, Universidad Autónoma de Tlaxcala.