Invocaba lo síquico para entender la experiencia humana, dice Du Pont a La Jornada

Después de 30 años, Gerzso es motivo de una gran retrospectiva

Se trata de 130 obras del pintor que se podrán ver en un museo de Santa Bárbara, California

El riesgo de lo abstracto vendrá a México, en noviembre, adelanta la curadora de la muestra

MERRY MAC MASTERS

En una época en la que el arte público tenía un gran valor, el pintor Gunther Gerzso (1915-2000) propuso lo síquico interno como fuente vigorosa para la creación artística y la comprensión de la experiencia humana, afirma Diana C. du Pont, curadora de El riesgo de lo abstracto: El modernismo mexicano y el arte de Gunther Gerzso (Risking the abstract: mexican modernism and the art of Gunther Gerzso), exposición itinerante del artista mexicano.

Se trata de 130 piezas, entre pinturas y obras sobre papel, que será inaugurada el próximo sábado en el Museo de Arte de Santa Bárbara, en California, y que se anuncia como la primera gran exhibición del artista en tres décadas.

Abstracción expresiva

Du Pont agrega: ''Muchas personas piensan que el trabajo de Gerzso tiene que ver con colores hermosos, formas agradables y geométricas, pero al estudiarlo se empieza a ver que tiene a la condición humana como guía principal. Además, la experiencia síquica del ser humano tiene sus raíces en la obra más temprana del artista que aquí se exhibe por primera vez". Se trata de la Colección Coronel Thomas R. Ireland, de la que proceden 16 piezas, entre tinta, gouache, técnica mixta, dibujo, carbón y pastel, fechadas de 1935 a 1940, cuando el pintor estudió escenografía en la Cleveland Play House, de Ohio.

De allí que Gerzso negaba ser abstracto, apunta Du Pont, al considerar que pintaba la ''auténtica experiencia humana. Claro, dado el contexto en el que trabajaba, no se hubiera descrito abiertamente como un pintor abstracto".

Por fin, luego de varios años de investigación, esta gran retrospectiva es una realidad. Du Pont, quien es curadora de arte moderno y contemporáneo del Museo de Arte de Santa Bárbara, recuerda que hubo una ''interrupción" a raíz de la donación e instalación el año pasado del mural de David Alfaro Siqueiros, Retrato del México actual (1932). El 12 de noviembre, El riesgo de lo abstracto... se exhibirá en el Museo de Arte Moderno de la ciudad de México y para el 19 de marzo, de 2004, viajará al Mexican Fine Arts Center Museum, en Chicago.

Con motivo de la exposición el museo de Santa Bárbara adquirió el óleo El tiempo se come a la vida (1961), que muestra la conexión de Gerzso con la poesía escrita en razón de que el título viene del poema El enemigo, de Baudelaire, apunta la entrevistada. El recinto ya contaba con dos óleos del pintor, Mal de ojo (1956) y Personaje (1957), mientras que en 2000 se compró el portafolio Palabras grabadas que el artista realizó con Octavio Paz.

-ƑCómo se inserta Gerzso en la escena internacional del arte?

-En México crea una abstracción expresiva que es equivalente al expresionismo abstracto en Estados Unidos, al art informel en París y al informalismo, en España. Trabaja con esas ideas a mediados del siglo XX en México. Sin embargo, después de la Segunda Guerra Mundial la energía pasó de la ciudad de México a la de Nueva York. Y debido a que Estados Unidos tenía una gran maquinaria para promover sus artistas, alguien como Gerzso se vio oscurecido no sólo por el poder del muralismo, sino por el expresionismo abstracto.

La independencia como valor

-ƑQué aporta Gerzso al arte?

-Realiza una pintura abstracta expresiva que propone la exploración interna de la experiencia humana en contraste con el arte público de índole social, política y realista. Estaba pendiente de las corrientes de la pintura contemporánea en las que los valores cambiaron de la creencia en una exploración al diálogo interno. Durante y después de la Segunda Guerra Mundial, con el ascenso del fascismo, se cuestiona la fuerza de la colectividad, pues hay un cambio en la exploración de las preocupaciones individuales paralelo al existencialismo.

La retrospectiva se divide en grandes temas que incluyen su convivencia con los exiliados surrealistas en México; su fascinación por las culturas antiguas del país; su profunda conexión con el expresionismo abstracto, y el riesgo que asumió con la abstracción cuando el muralismo aún predominaba en el arte mexicano.

Según Du Pont, la muestra abrirá nuevas puertas al arte mexicano en Estados Unidos, en vista de que mucho del trabajo artístico posterior a la Segunda Guerra Mundial, no se conoce.

''Los artistas de la Ruptura fueron inspirados por Gerzso, quien simbolizaba la independencia, y ésta era un valor. La Ruptura ha recibido mucho más cobertura que un artista como Gerzso, pero al ver lo que se ha escrito también habría que revisarla."