Preocupa la actuación de grupo violento que actúa en esa escuela de la UNAM

Trabajo Social exige aclarar el caso de tres alumnos que fueron baleados

KARINA AVILES

El director de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Carlos Arteaga, exigió a la Procuraduría General de la República (PGR) investigar y esclarecer con prontitud el caso de los tres estudiantes que fueron heridos de bala el pasado viernes.

En breve entrevista telefónica, el directivo universitario condenó la violencia y pidió una "respuesta pronta" de las autoridades judiciales competentes. Reiteró que la universidad solicitó la intervención urgente del Ministerio Público en el Distrito Federal para que se realizaran los trabajos periciales, tal como ya se hizo.

La oficina del abogado general de la UNAM ha seguido puntualmente el proceso que lleva a cabo la PGR ante el interés de que los hechos se esclarezcan.

El pasado viernes, cerca de las 10 de la noche se registró una riña que tuvo como saldo tres heridos de bala. Dos de ellos, José Luis Cordero y Noel Lucio Becerril, son estudiantes de la ENTS, y Mayra Claudia Valenzuela es alumna de la Universidad Pedagógica Nacional.

Los testigos señalaron como presunto responsable a Rodolfo Hernández, quien durante la huelga de 1999-2000 fue identificado por sus compañeros como parte de la ultra, uno de los grupos más radicales.

Trascendió que la riña ocurrió entre dos grupos antagónicos, uno encabezado por Rodolfo Hernández, quien fue expulsado de la institución hace más de dos años y, el otro, por Juan José Serrano Galicia, alias El Bronco Scan. Hace tres años, cuando la universidad dio a conocer la expulsión de Serrano Galicia luego de que éste le desfiguró el rostro a uno de los alumnos, informó que éste trabajaba para una empresa de seguridad privada.

Durante el paro estudiantil, Hernández y Serrano Galicia actuaban en un mismo grupo y se les conoció por las irrupciones violentas en el auditorio Che Guevara y por sus agresiones contra procesos institucionales, como las elecciones de representantes de alumnos y profesores.

De acuerdo con distintas fuentes, los dos jóvenes se habían distanciado, situación que estaría relacionada con la riña del pasado viernes entre el grupo de Serrano Galicia y Rodolfo Hernández.

Por otro lado, miembros de la comunidad estudiantil externaron su preocupación por este hecho y la actuación de un grupo que, escondido en el anonimato, actúa de forma violenta en la universidad. Su última aparición tuvo como objetivo boicotear las elecciones para consejeros universitarios y académicos realizadas el jueves pasado, pero pese a sus métodos -propios de un golpeador- no cumplieron su cometido.

Carlos Chávez, alumno de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, expresó que los hechos mencionados reflejan "un clima de absoluta impunidad" y un evidente interés de "destruir" la incipiente rearticulación de los estudiantes.