Las actividades se dedicarán a José María Covarrubias, animador de 17 versiones

Confirmada, la próxima Semana Cultural Lésbico-Gay; se prevé ''controvertida''

En el programa destaca la muestra Tod@s somos otr@, curada por Ganado Kim

Futuro incierto del encuentro si no hay cooperación colectiva, advierte organizador

YANIRETH ISRADE

José María Covarrubias, el iconoclasta, el promotor cultural, el militante de la causa gay, figura polémica aunque el término suene manido, personaje que vivió en vilo y cuyo porfiado temperamento garantizó la permanencia durante 17 años de la Semana Cultural Lésbica-Gay, anima una vez más esta actividad anual que tiene como sede tradicional el Museo Universitario del Chopo.

Lo hará sin embargo desde el vértice de los homenajeados, tras una súbita muerte que dejó en suspenso la continuidad de ese proyecto.

Amigos del activista agrupados en el Círculo Cultural Gay han organizado la versión 18 de la referida semana, dedicada por entero a Covarrubias, y que se inaugura en días próximos.

Destaca en el programa la colectiva plástica Tod@s somos otr@, curada por Edgardo Ganado Kim, y que se anuncia desde ya como "controvertida".

No obstante, sin el espíritu testarudo de Covarrubias, las emisiones futuras dependen de la cooperación colectiva, y aunque voluntades no faltan, el panorama es aún incierto.

"De ningún modo creo que la semana esté en riesgo", aclara Juan Carlos Bautista, actual presidente del Círculo Cultural Gay y uno de los encargados del homenaje a Covarrubias.

Explica que tras el deceso del promotor, en agosto de 2003, "la semana quedó en suspenso, pues no había quien organizara la de 2004".

Bautista, entre otros, se involucró al ponderar dos aspectos: la importancia de este proyecto en tanto "vitrina a través de la cual podemos expresar lo mejor que tenemos: la solidaridad y la creatividad de nuestra comunidad" y valorar la aportación de Covarrubias como "luchador social, promotor cultural y militante".

Pero el compromiso pleno de Bautista ha sido para este año; la organización de los próximas versiones es algo que aún no se ha definido.

-ƑSignifica que está en peligro la permanencia del proyecto?

-No lo creo. Debo aclarar que estoy hablando de manera personal, porque la respuesta debe provenir de todas las personas que conformamos el círculo. Aclaro: no es que de entrada no vayamos a colaborar los siguientes años. Lo que digo es que nuestra primera intención fue sacar esta semana, y en específico el homenaje a José María.

''Pienso que en los siguientes programas también estaremos involucrados -si el equipo no se echa para atrás, claro-, porque el trabajo ha sido arduo, y algunos desertaron en el camino, además sabes que nadie paga nada.

-En cuanto el apoyo institucional, Ƒlo han tenido por parte de la universidad?

-El apoyo de la UNAM ha sido total.

-ƑY suficiente?

-La UNAM ha sido muy generosa y considero que nos ha apoyado tanto como le ha sido posible. Creo que un evento de esta naturaleza requiere más patrocinios de otros sectores de la sociedad, sobre todo de la comunidad gay, por ejemplo empresarios, o los dueños bares, y organizaciones en general. Hay algunas instituciones que nos han otorgado ya su respaldo; me referiré a ellas en el anuncio oficial del comienzo de la semana.

-José María solía tener diferencias con la directora del museo, Alma Rosa Jiménez. ƑPercibiste alguna resistencia en tu propuesta de homenajearlo?.

-Absolutamente no. Todos sabíamos de los conflictos, pero al menos ella nunca ha mostrado animadversión hacia la comunidad gay. Mi opinión es que se trataba de un problema entre dos.

-ƑNo ha llegado demasiado tarde el reconocimiento al trabajo de José María?

-Siempre fue un personaje reconocido, pero tenía una personalidad muy turbulenta, contradictora, y al mismo tiempo generosa porque no persiguió propósitos lucrativos. Al final de cuentas, creo que todos valoraban sus aportes. Ahora lo he constatado, pues aquellos a quienes hemos invitado a participar lo han hecho encantados, con esa conciencia de que el trabajo de José María no debe olvidarse por ningún motivo.