PENULTIMATUM

Alianza Bush-el Vaticano

EL CARDENAL FRANCIS Arinze es de los más nombrados como posible sucesor de Juan Pablo II. En el Vaticano es responsable de la política antiaborto de la iglesia. Las líneas que sobre el tema ha establecido Arinze son las que sigue la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, que el lunes pasado aprobó negar la comunión y hasta excomulgar a los líderes políticos católicos que públicamente se manifiesten en favor del aborto legal. Uno de ellos es John Kerry, candidato demócrata a la presidencia. Aunque es convencido católico, lo es también de que debe respetarse el derecho de la mujer a elegir si recurre al aborto cuando ella considere conveniente. Para los analistas políticos del vecino país, el pronunciamiento de la Conferencia Episcopal muestra por primera vez de manera clara la alianza establecida entre la administración Bush y la Santa Sede con miras a las elecciones de noviembre próximo.

TRADICIONALMENTE, LA Iglesia católica, al igual que las otras grandes instituciones religiosas estadunidenses, había permanecido neutral en los debates electorales. Así lo hizo hasta en el caso del primer presidente católico de la historia de esa nación, John F. Kennedy. Pero según la dirigencia del Partido Demócrata, tal cambio de actitud muestra los alcances de la alianza ultraconservadora que no respeta fronteras y está causando la división entre los militantes de dicho partido y en general entre los católicos de Estados Unidos. En todo esto cuenta la intolerancia extrema pues, por ejemplo, en Europa ningún prelado se ha atrevido a negar la comunión a un político por defender el aborto. Ni siquiera en la Italia de Berlusconi. Aún más: el propio Papa dio la comunión al primer ministro británico Tony Blair, declarado defensor del aborto.

PERO ESA ALIANZA tiene otro propósito, no menos perverso. Según fuentes vaticanas confiables, también busca minar la posibilidad de que al trono de San Pedro llegue un representante de la Iglesia de los pobres, de los católicos que viven en los países del Tercer Mundo. Esas fuentes no ocultan al más viable, mexicano por más señas, y que oficia y declara domingo a domingo en la Catedral metropolitana. Si no damos su nombre es por no traicionar el secreto de confesión. Presentarse como el adalid de la pureza de la doctrina cuando que ese adalid ya nació en Durango, es una triquiñuela de ''ensotanado", como afirmó indignado un obispo mexicano-estadunidense de Texas.

ƑQUE PASARA EN esta contienda por la sucesión papal? ƑQué pasará en ese 2006 del humo blanco? Por lo pronto un obispo exaltado comentó que para evitar la politización de la Iglesia en las elecciones de Estados Unidos, lo mejor sería negar la comunión a todos. Pero tuvo pronta respuesta de algunos integrantes de la Conferencia Episcopal que comentaron la dificultad de excomulgar a los que no son católicos, puesto que nunca han recibido la comunión. Alguien propuso agregar una frase para advertir a los no católicos que si se les ocurría convertirse se les excomulgaría.