Se concentra en lo punitivo, no en la prevención: expertos

Oportunista, el plan de Fox para combatir inseguridad

Con dinero no se combate la delincuencia, aseguran

JOSE GALAN

El plan de seguridad que presentó el presidente Vicente Fox carece de fundamentos, porque se enfoca sólo a los aspectos punitivos y persecutorios sin considerar la prevención del delito, señalaron investigadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), quienes coincidieron ayer en que no es otorgando más recursos al combate a la inseguridad como se reducirá la delincuencia, y sostuvieron que el plan corresponde a la estrategia del mandatario para medir tiempos y obtener beneficios políticos.

Agustín Alvero Pérez Castillo, investigador del Departamento de Derecho de la UAM y del programa Ciudades seguras, sostuvo que los índices delictivos disminuirán cuando se establezcan campañas de defensa y respeto a los derechos humanos, se erradique la corrupción, y también la deshonestidad e impunidad de los cuerpos policiacos y del sistema de impartición de justicia en el país.

"De nada servirá que el Presidente garantice mayores recursos para la seguridad y que ofrezca un informe sobre sus 10 puntos en dos meses o 60 días, porque no es con dinero como se reducirá la delincuencia", añadió. "Además de que se requieren medidas preventivas en todos los órdenes, no sólo punitivas o persecutorias".

Por su parte, Roberto Gutiérrez López, jefe del Departamento de Sociología de la UAM, consideró como "oportunista" que Fox Quesada establezca un plazo de 60 días que corresponde al primero de septiembre, fecha en que rendirá su cuarto informe de gobierno, para rendir cuentas sobre los resultados de los 10 puntos anunciados para combatir la inseguridad pública y la criminalidad.

Especialista en cultura política y sistema político mexicano, Gutiérrez consideró que el presidente Fox sólo mide sus tiempos para obtener beneficios políticos, y agregó que las medidas propuestas "no son muy claras, ya que no precisan los indicadores que permitirán evaluar el cumplimiento de la promesa empeñada", aunque consideró que las medidas son aceptables y que deben ser realizadas en plazos razonables: "son medidas iniciales que tendrán que profundizarse y multiplicarse para hacer frente a un problema que pone en tela de juicio no sólo la eficacia de una política pública concreta, sino la razón misma del Estado mexicano".

En este sentido, consideró que las 10 acciones dadas a conocer por el mandatario no tendrán la eficacia deseada si el gobierno no se preocupa por hacer valer el estado de derecho en todas las áreas de la vida social, y mientras la ley se siga violando de manera impune "prácticamente por cualquier individuo".