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México D.F. Sábado 3 de julio de 2004
Prevén difícil que el PRI pierda
el gobierno, pero confían en ganar varias alcaldías y diputaciones
"Voto diferenciado", apuesta de la oposición
en Durango
Panistas tienen certidumbre de conservar 8 municipios,
como ahora; el PRD peleará la capital
SAUL MALDONADO Y CIRO PEREZ CORRESPONSAL Y ENVIADO
Durango, Dgo., 2 de julio. Mientras que la coalición
Todos por Durango (PRD, PT y Convergencia) advierte que el alto abstencionismo
que se prevé en las elecciones del próximo domingo, de entre
45 y 50 por ciento, beneficiaría a los candidatos del PRI, sigue
apostando, al igual que el PAN, por que los electores repitan el comportamiento
de hace 12 años, y en el momento de sufragar no voten por los candidatos
de un solo partido.
Lo
anterior, debido a que la oposición admite que difícilmente
el PRI perdería la gubernatura, no así municipios importantes
como la capital, en la que adelantan una lucha cerrada entre los candidatos
de PAN, PRI e incluso de la coalición, además porque ninguno
de los partidos de oposición tiene los recursos para trasladar a
los votantes hasta las casillas, especialmente hacia las colonias y comunidades
más alejadas, por lo que adelantan que prevalecerá el llamado
"voto duro".
Advierten que Durango es uno de los estados pioneros en
el sufragio diferenciado, ya que a pesar de que el elector opta por el
candidato del PRI a gobernador, frecuentemente elige a presidentes municipales
y diputados de partidos distintos del tricolor. Esto, afirman, ha
permitido que también en esta entidad ocurra el fenómeno
de la doble alternancia en alcaldías que han sido gobernadas por
tres partidos diferentes durante 12 años, destacando la capital
del estado y, de forma creciente, municipios de zonas rurales.
Sin embargo, todas las mediciones que a diario hacían
desde mayo, y los últimos ajustes a partir de las evaluaciones de
la asistencia de simpatizantes en los cierres de campaña, no bastan
para que los partidos, incluyendo el PRI, puedan hablar de un panorama
seguro, toda vez que no consideraron en sus variables la presencia de lluvia
en el día de la elección, la cual, admiten, inhibirá
la participación de electores.
Este año, explican, el periodo de lluvias no sólo
se adelantó, sino que es uno de los más intensos de los últimos
10 años.
Ante este panorama de incertidumbre, los partidos de oposición
revisan el registro histórico de los recientes procesos electorales
para esbozar los diferentes escenarios a los que podrían enfrentarse
este domingo fuera de la contienda por la gubernatura. Se han centrado
en los municipios donde consideran que tienen un candidato "fuerte" para
que en estos puntos se concentren la mayor parte de sus representantes
de casilla.
Parten no sólo de que en la elección para
gobernador los resultados han favorecido a los candidatos del PRI, sino
que hasta el cierre de las campañas el abanderado del tricolor
aventajaba al resto de sus contendientes.
Consideran que uno de los escenarios posibles para las
elecciones de este domingo es el de 1992, en el que si bien el priísta
Maximiliano Silerio Esparza obtuvo un triunfo holgado, el PRI perdió
varias de las presidencias municipales y los distritos electorales.
Ante esta posibilidad los panistas mantienen la certidumbre
de que por lo menos mantendrán ocho municipios, como hasta ahora,
aunque no necesariamente los mismos, además de que ganarían
de nuevo la capital, que ya fue gobernada por el PAN, en 1983, con Rodolfo
Elizondo, aunque luego siguieron dos administraciones del PT y dos del
PRI, que actualmente ocupa la alcaldía de Durango.
La coalición espera pelear la capital y ganar tres
municipios para el PT y uno para el PRD, aunque los petistas admiten que
podrían perder el municipio de Nombre de Dios, primera alcaldía
que ganaron y que mantuvieron por cuatro elecciones consecutivas.
El
PRI, en tanto, hace cuentas alegres y se deja llevar por la aceptación
que entre el electorado tiene su candidato a gobernador para asegurar que
en el peor de los casos ganaría 26 alcaldías, mismo número
que gobierna hoy, aunque admite que podrían ser diferentes municipios.
Un segundo escenario, que prevé el blanquiazul,
es el de las pasadas elecciones para gobernador, en las que el mandatario
actual, Angel Sergio Guerrero Mier, ganó por un margen más
reducido respecto de todas las elecciones a gobernador previas. Hace seis
años, con un padrón de 808 mil 797 electores, de los cuales
votó 56 por ciento, Guerrero Mier ganó por menos de 40 mil
votos, es decir, con menos de nueve puntos de diferencia respecto del candidato
del PAN.
A pesar de que todas las encuestas dan la ventaja al candidato
del PRI por un amplio margen, en el PAN aseguran que en las elecciones
para gobernador se encuentran apenas 6 por ciento abajo y que es una diferencia
que se puede revertir. Con este escenario, que no comparte en su totalidad
el panismo de Durango, casi duplicarían las alcaldías que
podrían gobernar los siguientes tres años.
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