México D.F. Domingo 19 de septiembre de 2004
Salarios menores, grupos saturados, más
horas de trabajo, entre las condiciones
Desventaja de maestros mexicanos ante sus similares
de la OCDE
Informe del organismo revela que las escuelas tienen
poca autonomía para el manejo de personal y la asignación
de recursos Desde 1996 se observan aumentos salariales importantes, asegura
CLAUDIA HERRERA BELTRAN
Los maestros mexicanos están en desventaja frente
a sus colegas que laboran en otros países de la Organización
para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Los
profesores de primaria en México ganan 20 dólares o menos
por hora, en contraste con los 50 dólares o más que reciben
en Alemania, Corea del Sur o Japón.
También enfrentan sobrecarga de trabajo, como ocurre
en prescolar, donde atienden 1.5 veces el promedio de alumnos de la OCDE,
o los de secundaria, que dan clases a 32 estudiantes, mientras los profesores
de otras naciones sólo enseñan a un promedio de 14.
El
informe Panorama Educativo 2004, presentado esta semana, admite que la
alta proporción de alumnos atendidos por los docentes mexicanos
puede influir de manera desfavorable en la calidad educativa.
"Es posible que esta alta proporción influya sobre
la cantidad de atención que se dedica a cada estudiante, al igual
que en términos de la calidad de los resultados", afirma.
El estudio de la OCDE incluye resultados de los 30 países
que integran este organismo, entre los que se encuentran los más
desarrollados como Estados Unidos, Japón, Corea del Sur, Gran Bretaña
y Alemania.
Otro de los puntos desfavorables para los maestros mexicanos,
refiere esta investigación, es su salario. La remuneración
promedio por hora de enseñanza después de 15 años
de experiencia es de 38 dólares en la educación primaria,
47 dólares en el primer ciclo de secundaria y 54 dólares
en bachillerato.
Los docentes de primaria de Hungría, México,
la República Eslovaca y Turquía tienen salarios "relativamente
bajos" por hora de enseñanza (de 20 dólares o menos). En
cambio, los maestros de Alemania, Corea del Sur, Dinamarca y Japón
reciben sueldos superiores, de 50 dólares o más.
En términos absolutos, añade, los salarios
obligatorios en México son bajos (poco más de la mitad del
promedio de la OCDE), pero se ubican entre los más altos si se comparan
con el producto interno bruto (PIB) per cápita.
En México, indica, la proporción de salarios
luego de 15 años de servicio con respecto al PIB per cápita
en la educación primaria y el primer ciclo de educación secundaria
se ubican en 1.77 y 2.25 respectivamente, lo que los sitúa en niveles
muy superiores al promedio de la OCDE de 1.33 y 1.37 por ciento.
Señala que desde 1996 se ha observado una tendencia
en el crecimiento salarial más pronunciada, con aumentos de 43 por
ciento para maestros con 15 años de experiencia en la educación
primaria (el promedio de la OCDE es de 11 por ciento) y de 47 por ciento
en el primer ciclo de educación secundaria (el promedio del organismo
es de 12 por ciento).
En el nivel primaria, la carga de instrucción para
los maestros en México, de 800 horas obligatorias por año,
está cercana a la media de la OCDE de 803 horas.
En cambio, dice, se requiere que un maestro de primer
ciclo de secundaria en México imparta mil 167 horas de clase al
año, la cifra más alta de tiempo de instrucción entre
los países miembros de la OCDE, que en promedio es de 717 horas.
Por otra parte, el informe analiza por primera vez qué
tanta autonomía tienen las escuelas para tomar decisiones y determina
que en el caso de México es limitada.
Los planteles nacionales sólo tienen poder de decisión
de 22 por ciento frente a 42 por ciento de los otros integrantes del organismo.
Las escuelas mexicanas tienen mayor margen de acción
en la organización de la enseñanza, cuantificada en 75 por
ciento, frente a 81 por ciento del promedio OCDE, pero concluye que tienen
prácticamente "nula participación" en las decisiones relacionadas
con el manejo de personal y la asignación de recursos cuando los
centros educativos de otros países tienen capacidad en este aspecto
en 44 por ciento.
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