Quito, 28 de febrero. Ecuador insistió hoy en que se requiere el cumplimiento de cinco condiciones por Colombia para restablecer las relaciones diplomáticas rotas hace un año a causa del bombardeo colombiano en la frontera ecuatoriana contra un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Nosotros también queremos restablecer las relaciones pero con dignidad y respeto, y para ello se necesitan por lo menos cinco condiciones de las cuales Colombia sólo está cumpliendo con una, afirmó el presidente ecuatoriano Rafael Correa, en vísperas del primer año del ataque en que murió el número dos de la guerrilla, Raúl Reyes, y otras 24 personas.

Las cinco demandas exigidas por Correa se refieren al control de la frontera común, indemnizaciones por el ataque, ayuda económica mediante Naciones Unidas para la atención de refugiados colombianos en su territorio, la entrega de información sobre el bombardeo –Quito sospecha de la participación de Estados Unidos– y que Bogotá cese sus denuncias de relacionar a Ecuador con la mayor insurgencia colombiana.

Apuntó que su par colombiano Álvaro Uribe sólo ha cumplido la primera de las condiciones, al mencionar su afirmación de que iba a fortalecer su frontera sur.

Correa destacó las afirmaciones del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, que desestimó cualquier relación de Ecuador con las FARC.

Ojalá esos farsantes que se pasan tratando de vincularnos con las FARC, con narcopolítica, tengan un poquito de decencia y escuchen las palabras del propio secretario general, dijo, al citar la visita que el funcionario efectuó al viernes a la frontera ecuatoriana.

En el ataque del primero de marzo de 2008, en que murieron además cuatro mexicanos y un ecuatoriano que estaban en el campamento clandestino de las FARC, Colombia aseguró haber hallado archivos de un computador de Reyes que vincularían a los gobiernos de Ecuador y Venezuela con la agrupación insurgente.

En tanto, las FARC dijeron que el operativo en que murió Reyes fue una puñalada a la paz, ya que él era el portavoz de las conversaciones con la sociedad colombiana y la comunidad mundial para buscar un canje humanitario y una salida política al conflicto.

Al recordar a Reyes, la insurgencia destacó la vocación de paz del líder rebelde, y que no escatimó esfuerzo ni sacrificio hasta llegar a ofrendar su vida.

Las FARC, que el pasado viernes sufrieron la muerte de 10 guerrilleros y la captura de otros 11 en enfrentamientos con el ejército en Cundinamarca, pidieron al opositor Polo Democrático Alternativo que impulse acuerdos políticos para frenar las pretensiones releccionistas del presidente Uribe, a fin de que se abran las puertas a un nuevo régimen con capacidad de cimentar la paz democrática, según un mensaje difundido por la agencia Anncol.