La Cámara de Senadores solicitó al gobierno federal la disminución inmediata y el congelamiento a escala nacional del precio del diesel y la gasolina mientras dura la contingencia económica, así como elaborar y aplicar un programa de apoyo al sector del autotransporte público.

El punto de acuerdo, propuesto por PRI, PRD, PT y Convergencia, originalmente planteaba solicitar a Felipe Calderón que se subsidie con un peso por litro de diesel a los transportistas multimodales organizados y la suspensión para el gremio del cobro del impuesto empresarial a tasa única (IETU).

Esto se suprimió del texto que se sometió a votación, debido a que fue la condición que puso la bancada del PAN para firmar el exhorto al Ejecutivo.

En tribuna, el senador por el PRI Ángel Aguirre Rivero leyó el acuerdo, que incluye una petición a Hacienda para que celebre convenios, de acuerdo con sus facultades, que faciliten a los autotransportistas el pago del impuesto sobre depósitos en efectivo. Además, el Senado solicitó a autoridades federales y estatales que pongan en marcha medidas para modernizar el parque vehicular.

Aguirre, quien presentó el punto de acuerdo, propuesto también por el coordinador del PT, Ricardo Monreal, el senador por Convergencia Gabino Cué y el perredista Rubén Velázquez, explicó que uno de los sectores que más ha resentido los embates de la crisis es el de autotransportistas, a tal grado que sinnúmero de hombres-camión han venido protestando por los altos costos del diesel, que mes con mes han aumentado y generado una escalada de costos.

A principios de 2008, explicó, el precio del diesel era de 5.93 pesos por litro, y a finales de ese año se había elevado 23.61 por ciento, contra 6.5 por ciento de la inflación. En este momento el litro del diesel está en 7.68 pesos, ya que se incrementó 30 por ciento, por lo que de no aplicarse medidas emergentes, la espiral inflacionaria podría afectar a todos los demás sectores productivos, recalcó durante la discusión en la que estuvieron presentes representantes de organizaciones del autotransporte.

Monreal recalcó que no se justifica que en un país petrolero, como México, los precios del diesel y la gasolina sean mucho más altos que en Estados Unidos.

Por otra parte, este miércoles entra en vigor el acuerdo por el que se dan a conocer las condiciones ambientales a que se sujetará la importación de vehículos usados con motor a diesel y peso bruto mayor a 3 mil 857 kilogramos.

En los argumentos se destacan las recientes determinaciones adoptadas en Estados Unidos para hacer más estrictos los límites máximos permisibles de emisiones contaminantes, de ahí que es previsible, advirtió el gobierno mexicano, que vehículos que no cumplan con los nuevos estándares sean comercializados en otros países, incluyendo el nuestro.

(Con información de Fabiola Martínez)