Ottawa, Canadá, 25 de mayo. La cadena estatal de Canadá cometió un error al mostrar una rutina que bromeaba respecto de un posible asesinato del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y que daba a entender que pudiera ser un ladrón, señaló un panel de la industria televisiva canadiense. El programa cómico Bye Bye, que se transmite por la cadena Radio Canadá, generó más de 200 quejas. En un segmento, dos presentadores discutían la elección de Obama. No somos racistas. Será bueno tener un negro en la Casa Blanca. Será práctico. Negro sobre blanco, será más fácil dispararle, indicó uno de los conductores. El Consejo de Normas de Difusión Canadiense indicó que no hay nada rescatable en la supuesta noción graciosa de que un presidente estadunidense reciba un disparo, y menos que sea más fácil por el color de la piel del mandatario. Fue un comentario molesto, dañino y racialmente ofensivo. El programa presentó también una entrevista con un actor que simulaba ser Obama. El conductor dijo: que todos los negros son parecidos, y luego advirtió a los espectadores que escondieran sus bolsos. El consejo indicó que las rutinas rompieron las normas y fueron demasiado lejos.