Las listas
Apellidos sugerentes
Candados a nuevos partidos
Parientes de la señora Marta en la lista de guarderías
También aparecen familiares de otros picudos
El primer coletazo del dinosaurio
Karam ante legisladores: preguntas sin respuesta
Precisiones del FMI
Espirales en acción
Remolinos y embustes
Antimagia y otras cosas...
urante su comparecencia ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión por los lamentables sucesos del pasado 5 de junio en la guardería ABC de Hermosillo, Sonora –en donde 48 niños perdieron la vida y decenas más resultaron heridos–, el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Daniel Karam, entregó a los legisladores la información sobre las poco más de mil 500 guarderías subrogadas por la entidad que encabeza, incluidos los datos de los representantes legales y los socios originales y actuales de esos centros, así como los contratos y las actas constitutivas correspondientes.
Exigen a Calderón garantizar los derechos humanos de Lucía Morett
a cancillería de Colombia sólo esperaba los resultados de las elecciones en México para pedir la extradición de la compañera Lucía Morett, con base en la ficha de la Interpol, lo cual es una violación fragante a los tratados internaciones de extradición, basada en argumentos falsos y chicanas leguleyas. Eso mismo caerá también por su peso, pues carece de sustento jurídico.
sí se autodenominan muchos de los jóvenes que decidieron anular su voto. La primera respuesta de los políticos profesionales a este movimiento, incluidos quienes hacen política con la pluma, fue el desdén. Conforme esta protesta singular fue cobrando fuerza les fue ganando la irritación; para ilustrar esta reacción no hay más que citar al siempre elegante Vicente Fox, quien afirmó que eso del voto en blanco es una jalada
; luego, los partidos mostraron miedo; y ahora, ante el muy significativo resultado que obtuvieron los anulistos –poco menos de 6 por ciento a nivel nacional, cerca de 11 por ciento en el Distrito Federal, y en algunos distritos, como el 2 de Ciudad Juárez, 12 por ciento–, se les acusa de haber devuelto el poder al PRI. Ninguna interpretación más descabellada que ésta. Los responsables de esta regresión son los panistas, los perredistas y sus aliados. Unos, por ineficientes; otros, por desconfiables; todos por abusivos. Lo han sido tanto que ahora muchos pensamos que todos los partidos son iguales y anulamos simplemente porque votar por uno de ellos daba igual. Como son indistinguibles, mi voto por un partido no hubiera expresado mi preferencia, sino simplemente mi aceptación para que sigan como van.
l PRI ganó en buena medida por los errores de los panistas en los gobiernos, comenzando por Calderón, y los todavía mayores errores del PRD, cuyos dirigentes actuales hicieron maroma y teatro para quedar donde están en lugar de haber pensado en el fortalecimiento de su partido para cumplir con su cometido: competir por el poder con la mayor fuerza posible.
e están dando distintas explicaciones al fracaso panista, todas construidas sobre distintas lógicas. A mí me parecen respetables, pero coyunturales, y me aventuro a lanzar mi cuarto a espadas: la derrota se fraguó durante tres años.
illones de electores que apoyaron a la coalición Por el Bien de Todos en 2006 no revalidaron su decisión de apoyar un cambio por la izquierda. O bien se abstuvieron, o anularon la boleta o prefirieron votar al PRI. Sumados, los votos efectivos de la izquierda (PRD, PT, Convergencia) arañan 20 por ciento del total, pero la idea de conformar un amplio frente de izquierda ha sido superada por los antagonismos partidistas y los conflictos intestinos. Junto con el PAN, el PRD –y en él se incluyen todos sus líderes– es el gran perdedor de esta contienda. A la evidencia de su escasa e inamovible implantación nacional se añade ahora la pérdida de posiciones en sus antiguos cotos de influencia (que aún lo salvan de un desastre mayor).
l derramamiento de sangre y los sufrimientos que los gorilas hacen caer sobre los hondureños podrían haberse ahorrado si Estados Unidos no hubiese adoptado una actitud ambigua y cada vez más complaciente ante el golpe de Estado. Obama reitera en Moscú que reconoce a Zelaya como único presidente legítimo y proclama que la potencia no toma en cuenta las diferencias políticas cuando los gobernantes han sido electos pero horas después, en abierta contradicción con el dicho de su jefe, la secretaria de Estado Clinton cantinflea ante la prensa con tal de no calificar el golpe por su nombre, habla por teléfono con el presidente gorila –un tácito reconocimiento–, anuncia el nombramiento como mediador de alguien de tan dudosa credibilidad como el presidente de Costa Rica Oscar Arias y menciona que este conducirá una negociación entre las partes
. Mientras el presidente Manuel Zelaya puntualiza que no hay nada que negociar con los golpistas pues sería traicionar sus principios y al pueblo que lo eligió y que el único objetivo de la mediación es planificar su salida del poder.
uego de varias semanas en las que se insistió en la presencia de brotes verdes
que auguraban que la recesión había tocado fondo, se acaba de informar que en junio se perdieron 467 mil puestos de trabajo en Estados Unidos, haciendo que la tasa de desempleo llegase a 9.5 por ciento. Desde diciembre de 2007 el número de personas desempleadas ha aumentado 7.2 millones y la tasa de desempleo ha crecido 4.6 puntos porcentuales. Este dato evidencia que la recesión continúa y se profundiza.
l dramaturgo y psiquiatra chileno Marco Antonio de la Parra es bien conocido en México, adonde viaja con frecuencia y en donde se escenifican –con mayor o menor fortuna– varias de sus obras, en ocasiones simultáneamente en algunos escenarios. Con El continente negro toma una idea un tanto decimonónica en la visión de África como un continente ignoto e inexplorado, con clara referencia al nombre que H.M. Stanley puso a ese continente y, como dice Nicolás Alvarado en el programa de mano, la idea de Freud de que las mujeres son un continente negro
difícil de descifrar y que De la Parra extiende a ambos sexos al enfrentarse al otro. En el texto, existen llamadas telefónicas desde África y deseos de escapar hacia allá, sin especificar naciones, como si fueran lo mismo unas y otras, lo que robustece esa anticuada noción de misterio que se tuvo hacia un territorio que fue tardíamente explorado –y saqueado– por los europeos.