Promete Meza que el equipo mejorará, tras sucumbir ante Jaguares en el estadio Azul
Los aficionados abuchearon a los Cementeros y corearon jugadas de los visitantes
Conejo Pérez, vitoreado por los seguidores celestes
El chileno Emilio Hernández, el quinto refuerzo
Domingo 26 de julio de 2009, p. a13
El Cruz Azul de Enrique Meza está en pañales. El regreso del exitoso timonel al club de sus orígenes fue triste y salió de la cancha del estadio Azul no sólo con la derrota por 2-0 ante Jaguares, sino con el abucheo del público a cuestas. Yo les ofrezco que todo va a mejorar
, prometió el técnico con una mezcla de coraje y pundonor.
En partido pasado por agua, el equipo de Luis Fernando Tena cosechó sus primeros tres puntos en la fecha uno del torneo Apertura 2009, con anotaciones al minuto 17 de Oribe Peralta y al 85 de Ezequiel Orozco.
Empapados, henchidos de coraje y desilusionados salieron del inmueble los seguidores cementeros, no sin antes manifestar ampliamente su disgusto: dedicaron rechiflas, abucheos y corearon oles en favor de los visitantes, tras el segundo tanto de los chiapanecos, que clausuró sus esperanzas.
Fidelidad de Sangre Azul
Entonces se encaminaron hacia las salidas y sólo la barra Sangre Azul se mantuvo en su sitio; sin embargo, apenas se escuchó el pitazo final, la porra consagró sus cánticos al eterno ídolo Óscar Conejo Pérez: eres un chingón
, le gritaban al guardameta de Jaguares, quien correspondió lanzando primero sus guantes y luego abrazos.
La Máquina fue un desastre. El primer tiempo fue todo de los pupilos de Luis Fernando Tena, quienes se asentaron mejor sobre el césped mojado. El ataque compuesto por Neri Cardozo, Oribe Peralta, Danilo Verón y Adolfo Bautista funcionó a medio gas, pero con el conocimiento que da el tiempo.
Al minuto 17 Peralta fusiló con un tiro raso que no logró atajar Yosgart Gutiérrez, uno de los pocos cruzazulinos que no acudieron a saludar al Conejo antes del silbatazo inicial. Melvin Brown y Christian Riveros se hicieron bolas en la zaga y todo se facilitó para el incisivo Oribe.
Por los de casa hubo un par de disparos desviados de Ramón Núñez, un remate cercano de Mario Ortiz, mientras que Alejandro Vela apenas se vio, al igual que los discretos Emanuel Villa y Jaime Lozano, y el desgarbo de Luis Landín. Para el complemento mostraron reacción, con base en puros intentos individuales y sin puntería.
Los técnicos agotaron sus cambios, y fue en un momento de inspiración del Bofo, con sorpresivo taconcito, que Orozco logró sellar la victoria.
Tena sostuvo: la lluvia nos ayudó a que Cruz Azul no se afianzara, ganamos con un poco de suerte, pero hay mucho por corregir
. Meza señaló que estamos sin poder encontrarnos, sin combinaciones
, y aceptó el enojo de la gente, pues también nosotros estamos con esa molestia
.
Trascendió que el chileno Emilio Hernández se convirtió en el quinto refuerzo celeste.