La Red Nacional de Resistencia Civil contra las Altas Tarifas de Energía Eléctrica, integrada por organizaciones sociales, civiles y pueblos de Campeche, Chiapas, Chihuahua, Distrito Federal, Guerrero, Oaxaca y Veracruz, exigió la liberación de cinco de sus integrantes detenidos el pasado 10 de julio en Candelaria, Campeche.

Sabemos que el proceso jurídico instrumentado por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la Procuraduría General de la República (PGR) contra nuestros compañeros y compañeras, Sara López, Guadulupe Lizcano, Joaquín Aguilar, Élmer Castellanos y Guadalupe Borjas es un escarmiento a su actividad política y organizativa, ya que criminaliza su lucha social mediante acusaciones apócrifas y ridículas que carecen de legitimidad.

La Red advirtió que continuará las acciones de protesta en diferentes estados hasta lograr su liberación. Utilizaremos todos los recursos que estén a nuestro alcance hasta lograr la liberación de nuestros compañeros y compañeras, añadió, al tiempo de informar que los próximos 12 y 13 de septiembre realizará en la ciudad de Campeche un Encuentro Nacional de las Resistencias contra las Altas Tarifas de la Energía Eléctrica y por la liberación de los detenidos.

Agregó que el 14 de septiembre llevará a cabo, junto con otras organizaciones sociales y civiles, una gran movilización en la ciudad de Campeche y en todos los estados, donde tiene presencia la Red Nacional.

“El encarcelamiento injusto de estos luchadores sociales es parte de un operativo de represión legal, ordenado desde la CFE y la PGR con el permiso del gobierno de Campeche, que incluye 27 órdenes más de aprehensión, la integración de averiguaciones previas contra varias personas por el delito de ‘robo a la riqueza de la Nación’ y un hostigamiento constante de agentes de las policías Federal, estatal preventiva y municipal hacia los integrantes de la Resistencia Civil”, manifestó.

Advirtió que seguirá resistiendo a los abusos, opresiones e injusticias de la CFE y de los gobiernos estatales y federales, para construir formas de vida digna y justa que respondan a las necesidades de los pueblos y no a los intereses de gobiernos y empresas.

Por su parte, en el norte del país, la frase yo soy una víctima más de CFE es recurrente en letreros colocados dentro de restaurantes y establecimientos comerciales de la región carbonífera de Coahuila.

En esta zona, ubicada en la parte norte del estado, los comerciantes tienen más de cinco años pidiendo a la CFE que les homologuen las tarifas de cobro con las que aplica en ciudades como Acuña y Piedras Negras.

Sin embargo, hasta ahora la empresa gubernamental no ha respondido satisfactoriamente a la propuesta, según Leopoldo Elguezabal, propietario del restaurante El Presidio, quien señaló que el planteamiento se ha presentado desde la Cámara de Comercio local.

Dijo que de manera inexplicable, CFE aplica tarifas diferentes en ciudades que se encuentran en una misma zona geográfica a escasos 100 kilómetros de distancia.

Explicó que los habitantes de Múzquiz pretenden que la CFE iguale las tarifas de cobro con las aplicadas en Sabinas (municipio localizado a 30 kilómetros de distancia) y en Piedras Negras, municipio fronterizo con Texas.

Señaló que en Sabinas y Piedras Negras las tarifas de cobro son menores y los subsidios de la CFE a las citadas tarifas es mayor que los beneficios que tienen los muzquenses, aun cuando las condiciones geográficas y climatológicas son semejantes.

Lo anterior, en un contexto en el que actualmente, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se encuentra produciendo por debajo de 60 por ciento de su capacidad total de generación. Por lo tanto, existe una reserva no utilizada de 40 por ciento. Irónicamente, esta reserva de generación corresponde precisamente a lo que generan las empresas privadas. Es decir, la CFE tiene capacidad de cubrir ciento por ciento de la demanda energética nacional pero busca priorizar que las empresas privadas generen su propia energía, mientras la población tiene que pagar altas tarifas eléctricas.

La lucha por reducir las tarifas eléctricas en Nayarit, que en los últimos años ha causado bloqueos de carreteras, plantones en instalaciones oficiales y encarcelamiento de líderes populares, ha permitido lograr algunos subsidios emergentes, o –como se hará en unos días más– la colocación de medidores especiales y la venta de tarjetas de crédito de luz, pero continuará adelante hasta lograr un cobro adecuado a la pobreza del pueblo, señala José Luis González Mora, quien en junio pasado encabezó la toma de instalaciones de la paraestatal.

En Zacatecas durante el presente año campesinos de varios ejidos del municipio de Guadalupe han realizado al menos tres marchas y cuatro plantones frente a las instalaciones de la CFE en protesta por los altos cobros y los cortes de luz a los pozos de riego, a aquellos agroproductores que no han podido cubrir sus elevados adeudos.

Manuel Hernández Maldonado, uno de los 40 representantes de los productores adheridos a El Barzón, quienes participaron en el bloqueo del lunes 13 de abril, indicó a La Jornada que de 110 pozos de riego existentes en dos distritos de desarrollo rural, en los últimos días la CFE le ha cortado la luz a 30.

Aunque el problema se resolvió momentáneamente luego de una reunión entre los campesinos inconformes, funcionarios de la CFE y del gobierno de Zacatecas, sin embargo por los altos costos de la energía eléctrica muchos agricultores pronto volverán a adeudar los pagos a la paraestatal y los cortes de suministro volverán.