Agrupaciones campesinas afirmaron que es insostenible que en tres años de gobierno México presente la caída de su economía y de la competitividad, el repunte de la inseguridad pública, el incremento de pobres y del desempleo, la falta de oportunidades y la pérdida del bienestar social, y urgieron al presidente Felipe Calderón a emprender, con la real participación de todos los sectores sociales, un cambio de modelo económico, político y de las instituciones, que reconstruya la democracia y detenga el desplome nacional.

A dos semanas del Informe de Gobierno, la agrupación El Barzón afirmó que el sexenio está prácticamente perdido en todos los ámbitos: económico, seguridad, bienestar social y competitividad, por lo que una opción viable, consideró, es atender el llamado del jefe de Gobierno local, Marcelo Ebrard, de instalar la próxima semana un consejo nacional de reactivación económica, donde intervengan todos los sectores del país.

El dirigente barzonista Alfonso Ramírez Cuéllar se pronunció por no desestimar las cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) respecto al crecimiento de cerca de 11 millones de pobres en el país en los últimos dos años.

Cambió la tendencia de crecimiento que era débil y ahora se rompió, está creciendo nuevamente la pobreza. Al final de este año veremos un severo golpe no sólo para los pobres, sino también para la clase media, advirtió en entrevista.

La Central Campesina Cardenista (CCC) se pronunció por la reconstitución del país y sus instituciones políticas y sociales, luego que éstas fueron reprobadas por la ciudadanía en las elecciones de julio.

El líder Max Correa manifestó que el actual es un sexenio en el que se vio interrumpida la transición democrática, por las condiciones en las cuales Calderón llega al poder. Se trata, dijo, de un sexenio en el que el Ejecutivo se ha respaldado no en la ciudadanía ni en el voto sino en el Ejército.

“Un sexenio en el que se manifestó la pérdida de la soberanía alimentaria con el incremento del precio de la tortilla y alimentos de la canasta básica; donde se expresó la pérdida del empleo y de nuestra soberanía económica, con el desmantelamiento de la planta productiva.

Es un sexenio donde este conjunto de fenómenos sociales, económicos y políticos nos lleva a la conclusión de que está agotado el modelo económico, político y social del país, y que por lo tanto exige un cambio profundo del modelo y una reconstrucción democrática de sus instituciones, economía y sistema político, afirmó en entrevista.

Para el Consejo Agrario Permanente, a pesar de que sus integrantes han sido aliados del gobierno, por mantener la paz y tranquilidad del campo, no ha habido respuesta positiva de éste a sus demandas.

El actual presidente del frente y líder de la Unión General de Obreros y Campesinos de México, José Luis González Aguilera, afirmó que hay una inquietud en el campo porque muchos programas no llegan y el dinero que sale de éstos se les asigna a los gobernadores y ellos a sus cuates, por lo que no hay reciprocidad hacia las organizaciones.