El presidente Felipe Calderón felicitó y agradeció muy especialmente al jerarca cetemista Joaquín Gamboa Pascoe la enorme responsabilidad con que el movimiento obrero organizado se condujo en el año en que vivimos en peligro, según afirmó, en referencia a una famosa película.

Desde su asiento en el presídium, con las manos en alto, ya que tuvo dificultades para ponerse de pie, el dirigente de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) agradeció los aplausos y se declaró complacido con esa recompensa presidencial.

Sentimos que nos hace justicia, porque hemos cargado con la más fea, expresó en entrevista el octogenario líder, para luego descartar que el salario mínimo aumente 10 por ciento el próximo año. Ya no creo en mentiras.

Rodeado de los dirigentes de las cúpulas empresariales y del sindicalismo oficial en la asamblea del Infonavit realizada en Los Pinos, Calderón celebró también que entre enero y noviembre hubo un saldo positivo de 24 mil nuevos empleos.

Parafraseando alguna película muy famosa de hace algunos años, que el título no recuerdo, era más o menos así: el año que vivimos en peligro, prácticamente se puede aplicar una buena parte a 2009. Fue un año, está siendo un año muy complejo, muy difícil, muy desafiante.

Con ello el jefe del Ejecutivo aludió ayer a una cinta australiana financiada por Hollywood que trata de una historia de amor entre un periodista y una diplomática en medio de una revolución en Indochina.

Y todo porque, según Calderón, nos cayó encima la economía de Estados Unidos tras la quiebra de su sistema financiero.

Don Joaquín

Después aprovechó para felicitar al movimiento obrero organizado, en particular a quien es su líder, a don Joaquín Gamboa Pascoe, por la enorme responsabilidad con la se ha conducido con México.

Al presumir su alianza con este representante de la añeja estructura sindical priísta, reiteró que gracias a la responsabilidad de los sectores sociales y económicos, en especial de los trabajadores, México pudo sortear la peor parte de la crisis.

¡Qué duda cabe de que esta crisis ha golpeado severamente a México!, exclamó para luego insistir en que el apoyo de los trabajadores permitió minimizar los impactos de la crisis sobre la población.

Aunque se declaró convencido de que este enorme esfuerzo rindió frutos, también reconoció que no se percibe con su justa dimensión por la crisis tan severa que tuvimos.

Pero el hecho real e incontrastable, añadió Calderón, es que se recuperaron empleos, y ahí están los trabajadores en el Seguro Social con nombre, apellido y la cuota obrero-patronal que se paga bimestralmente.

De hecho, aseguró, en noviembre se generaron 106 mil nuevos empleos, aunque luego matizó su optimismo al señalar que falta mucho por recuperar, dado que México sí sufrió mucho en esta crisis.

Satisfecho con las promesas de Calderón en cuanto a la recuperación económica, Gamboa Pascoe explicó después que ya toca a los obreros no un regalo, sino una recompensa a su esfuerzo.

El Congreso del Trabajo y la CTM se ufanan porque su línea de conducta es de combate pero de responsabilidad con los trabajadores y con México, expresó.

Luego estimó que el salario mínimo se incremente alrededor de 5 por ciento, aunque reconoció que no es suficiente ni seis ni siete ni 10 por ciento.

Prometió que el sindicalismo oficial peleará por un mayor aumento, aunque de antemano descartó que llegue a 10 por ciento en medio de esta crisis.

Afectado por un ataque de tos, Gamboa pidió agua a un colaborador e interrumpió la entrevista. Ya no puedo hablar, muchas gracias.