Jos. La policía desmintió este miércoles el balance de 500 muertos en la matanza perpetrada por musulmanes contra poblados cristianos el pasado fin de semana en Nigeria, y aseguró que son 109 las víctimas. Mientras, el papa Benedicto XVI condenó la violencia que no perdona a niños indefensos. El jefe de la policía aclaró que el recuento de los muertos se hizo en presencia de médicos forenses y funcionarios gubernamentales. Fuentes locales anunciaron un balance que va de 200 a 400 víctimas mortales. Es extremadamente difícil obtener cifras exactas en ese tipo de situaciones, recordó el investigador francés Marc Antoine Pérousse.