La decisión de aplicar por tercer año consecutivo la Evaluación Nacional del Logro Académico en Centros Escolares (Enlace) a alumnos de bachillerato es sólo una coartada educativa que intenta ocultar el fracaso de una reforma curricular que no generó ninguna mejora en el aprendizaje de los alumnos, afirmó César Navarro Gallegos, catedrático del Instituto de Investigaciones José María Luis Mora.

Al concluir la aplicación de la prueba a unos 980 mil estudiantes que cursan el tercer año de educación media superior en el país, subrayó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) no quiere reconocer que los resultados en sus dos primeras aplicaciones no se van a modificar con exámenes estandarizados, que además se ensayan a costa de la currícula escolar.

Enfatizó que las autoridades educativas prepararon durante semanas las condiciones para aplicar Enlace, a fin de elevar el puntaje en los resultados, pues realizaron exámenes simulacro con mecanismos y contenidos similares a los de la prueba, lo que en cualquier parte del mundo se considera un mecanismo de perversión del proceso de evaluación, pues se obtiene una fotografía retocada con resultados fraudulentos.

Diferencias económicas

Navarro agregó que los exámenes estandarizados no miden las capacidades de aprendizaje de los alumnos, porque no toman en cuenta las diferencias sociales, culturales e incluso económicas que afectan el proceso educativo. Por ello, recordó la posición asumida por la Universidad Nacional Autónoma de México de rechazar la aplicación de Enlace, pues se trata de un mecanismo poco efectivo para conocer realmente cómo se construye el conocimiento y cómo podemos fortalecerlo.

En entrevista por separado, Carlos Muñoz Izquierdo, investigador de la Universidad Iberoamericana, destacó que la evaluación es un factor a considerar entre muchos otros, pues por sí mismo no detona una transformación educativa, y consideró que los ensayos de la prueba pueden ayudar a un mejor desempeño del alumno, aunque sin duda tiene costos inevitables, como el destinar tiempo curricular a estas prácticas.

Afirmó que los resultados de Enlace ya han confirmado que no se traducen en acciones de mejora automáticas. Es necesario crear un proceso de transformación que no sólo incluye la evaluación de alumnos y docentes, si no de acciones concretas.