Buenos Aires, 28 de marzo. Independiente, líder del torneo Clausura 2010, consiguió este domingo un valioso empate 1-1 en su visita a Colón de Santa Fe, por la undécima fecha del campeonato argentino, y se afirmó en lo más alto, al mismo tiempo que Boca sufrió una contundente caída de 4-1 ante el humilde Chacarita.

El equipo rojo que dirige Américo Gallego empezó de la mejor manera con un gol de larga distancia de Lionel Núñez, a los ocho minutos de iniciado el partido, pero la alegría le duró poco, porque Colón empató por conducto de Esteban Fuentes (19).

El empate le sentó mejor a Independiente, ya que el desarrollo comenzó a ser desfavorable a partir de las expulsiones de Leonel Galeano y Darío Gandin, mientras Marcelo Goux vio la tarjeta roja por el lado de Colón.

Con este resultado, Independiente alcanzó los 24 puntos y, aunque no pudo escaparse, estiró ligeramente la diferencia sobre el escolta Godoy Cruz (21), al que aventaja por tres unidades cuando restan ocho fechas para el final del campeonato, y a Estudiantes (20), que todavía se anima a dar batalla por el título.

Por la noche, Vélez Sarsfield, con una formación alternativa, ya que el director técnico Ricardo Gareca decidió guardar a los titulares para la Copa Libertadores, derrotó 1-0, con gol del zaguero Marco Torsiglieri (16), a Atlético Tucumán, que se mantiene en lo más hondo de la tabla y cerca de perder la categoría.

En Sarandí, Arsenal dio otro empujón a San Lorenzo, que acumula cinco caídas consecutivas, tras derrotarlo 1-0, con gol de Nicolás Aguirre.

También Boca Juniors mostró una imagen completamente distinta tras su victoria de 2-0 en el superlcásico ante River Plate hace tres días y cayó estrepitosamente 4-1 frente a Chacarita, con una bajísima producción colectiva.

Matías Giménez (28) adelantó en el resultado a los xeneizes, pero el equipo auriazul decayó por completo en la segunda parte y Chacarita dio vuelta a la cuenta con anotaciones de Facundo Parra (46 y 81), Nicolás Ramírez (58), tras un penal que el arquero Javier García le atajó a Parra, y Sebastián Scierilli (87).

La caída de Boca se agregó a sus conflictos internos, cuando Martín Palermo, máximo goleador del club, se enojó con el técnico Abel Alves, al ser remplazado por Lucas Viatri, a los 71.