Presunto pacto entre bandas para evitar enfrentamientos ahí
entidad segura, ahora refugia a narcos
La zona serrana es “ruta de paso de Los Zetas”
Domingo 16 de mayo de 2010, p. 4
Querétaro, Qro., 15 de mayo. Las autoridades municipales y estatal de Querétaro califican la entidad como una de las más seguras del país, pues no ocurren enfrentamientos entre miembros del crimen organizado o entre éstos y policías, pero el presunto secuestro del panista Diego Fernández de Cevallos acrecienta las dudas sobre esa postura.
Fuentes consultadas señalaron que en esta ciudad y en sus municipios conurbados, entre ellos Corregidora, El Marqués, Pedro Escobedo y Huimilpan opera el cártel de los Beltrán Leyva; incluso existe un presunto pacto entre narcotraficantes para no protagonizar enfrentamientos, porque allí radican sus hijos y familiares.
La zona serrana del estado es ruta de paso de Los Zetas, donde tampoco han ocurrido enfrentamientos entre presuntos narcotraficantes o entre éstos y la policía, agregan las fuentes.
No obstante, en la entidad se han reportado secuestros, desapariciones, hallazgos de encajuelados y ejecutados, mismos que han sido calificados por las autoridades como hechos aislados
, y la justificación es que la mayoría se cometieron en otras entidades, pero los cuerpos fueron abandonados en Querétaro.
El caso más reciente es la desaparición de 23 migrantes (16 del municipio de Landa de Matamoros y siete de Pinal de Amoles) desde el 17 de marzo y el 5 de abril, respectivamente, que se presume es producto del crimen organizado. La Procuraduría General de Justicia de la entidad no ha dado a conocer avances de la indagación.
En enero pasado, en Landa de Matamoros, ubicado en la Sierra Gorda del estado, elementos del Ejército Mexicano localizaron un laboratorio donde se procesaba droga sintética, el cual fue desmantelado.
Asimismo, en diciembre de 2009 fueron localizados los cuerpos de siete hombres calcinados en un vehículo sobre la carretera México-Querétaro. La PGJ descartó vínculos con el narcotráfico.
En agosto de 2008, los cuerpos de cuatro policías federales fueron localizados en un vehículo sobre un paraje en la delegación municipal de Santa Rosa Jáuregui, que días antes habían sido levantados en San Luis Potosí, presuntamente por un posible ajuste de cuentas.
En enero de 2008, un menor de edad fue levantado por desconocidos y posteriormente asesinado; el cuerpo fue abandonado en Acámbaro, Guanajuato, por lo que la procuraduría estatal empezó la averiguación previa SJR2/37/08.