Silao, Gto., 17 de julio. Al subrayar que en México todos nos podemos expresar, actuar y criticar con absoluta y plena libertad, el presidente Felipe Calderón Hinojosa, convocó nuevamente al diálogo a los actores sociales y políticos y a que, por encima de sus diferencias, reconozcan los temas que los unen, como es el desafío de la inseguridad, el cual representa la mayor amenaza para esa libertad de que gozan los ciudadanos.

Sin señalar directamente a nadie, resaltó que como parte de la libertad que existe en el país, también se puede disentir y organizarse para luchar por las ideas, para elegir a los gobernantes, pero también, advirtió, los conflictos deben solucionarse por las vías institucionales con las que contamos y con apego a las reglas democráticas.

Calderón acudió a esta ciudad para inaugurar la Expo Guanajuato Bicentenario, la cual forma parte de las celebraciones por el aniversario de la Independencia, y a cuyos pabellones, que contienen la historia del planeta y de México, identificó como el espacio posible para el diálogo con el pasado, el presente y el futuro.

La importancia del pluralismo

Sobre todo subrayó la importancia de que el pluralismo que distingue a la sociedad mexicana permita reconocer los temas y cuestiones que están por encima de cualquier diferencia de género, de grupo, religión o partido político. Entre ellos, el de la seguridad pública.

Ubicó a este problema como la mayor amenaza a la libertad conquistada por el país, de ahí la importancia de contar con una política de Estado, la cual sólo podrá construirse en el ejercicio libre de las ideas y también de las comunes responsabilidades, dijo.

El mensaje calderonista se inscribe en el clima de violencia que continúa y tuvo una nueva expresión el jueves pasado, cuando ocurrió la explosión de un coche bomba en Ciudad Juárez, la cual dejó un saldo de cuatro muertos y varios heridos.

Además, el viernes, la Procuraduría General de la República dio a conocer que ya suman más de 24 mil las personas que han perdido la vida en la lucha emprendida por esta administración contra el crimen organizado.

Acompañado por el gobernador Juan Manuel Oliva Ramírez, los secretarios de Salud, José Angel Córdova Villalobos; de Educación, Alonso Lujambio, y el mandatario electo de Puebla, Rafael Moreno Valle, entre otros, el Presidente también advirtió que los festejos por el bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución no son patrimonio de grupos ni de parcialidades, sino patrimonio de todas y todos los mexicanos.

Lujambio informó que la Expo Guanajuato Bicentenario tuvo un costo de mil 100 millones de pesos, de los cuales 740 fueron aportados por el gobierno del estado, 280 por la Cámara de Diputados y 80 millones más del fideicomiso para el bicentenario a nivel federal.

En la visita de trabajo que sólo tuvo este acto público y luego una reunión privada con el comité organizador de los festejos del bicentenario, también resaltó la ausencia de funcionarios del área de comunicación social de Presidencia. No estuvieron ni los del equipo saliente de Max Cortázar, ni del nuevo que a partir de hoy está encabezado por Alejandra Sota.

El gobernador electo de Puebla, Rafael Moreno Valle, conversó largo con el secretario de Salud, Córdova Villlalobos, para empezar a analizar, según comentó después, los proyectos que echará a andar a partir de febrero de 2011, cuando tome posesión del cargo.

En su discurso, Calderón también hizo alusión a la jornada electoral del 4 de julio, cuando se refirió a los legados que la patria debe ejercer y defender, entre ellos la democracia, cuyo valor estriba en que de los puntos contrarios se decida por voto quién y cómo ha de llevar el rumbo.

Otros temas y desafíos que son comunes a los mexicanos y deben formar parte del diálogo son el de la pobreza, la cual –dijo el mandatario federal– sí se puede erradicar, igual que la ignorancia; el reto es abrir oportunidades para todos.