Washington, 16 de agosto. Un vocero del presidente Barack Obama afirmó hoy que es innegociable el retiro de tropas estadunidenses de Afganistán a partir de julio de 2011, lo que contradice al comandante de la fuerza de ocupación del país centroasiático, el general estadunidense David Peatreus, quien el domingo afirmó que se trata de un proceso, no de un acontecimiento, y que todo dependerá de las circunstancias.

Cuando el presidente hace una promesa, la cumple, dijo el portavoz presidencial Bill Burton, quien sin embargo confirmó declaraciones de Obama en el sentido de que el repliegue del contingente estadunidense –el más numeroso de los 150 mil soldados de la Fuerza Internacional de Seguridad para Afganistán– será limitado y dependerá de la situación bélica del momento.

La discusión ocurre mientras en el terreno el mando de ocupación impulsa una estrategia de recuperación del control territorial de Afganistán, donde la resistencia talibán se fortaleció en los últimos tres años.

La situación en esta guerra también fue señalada como factor central para el retiro del secretario de Defensa estadunidense, David Gates, quien dijo a la revista de análisis internacional Foreign Policy que en 2011 estaré en posición de saber si nuestra estrategia funciona, y en 2012 habrá oportunidad para el relevo en el Pentágono.

También para 2011, a partir del primero de enero, las compañías de seguridad privada, afganas y extranjeras, deberán ser desmanteladas, toda vez que se han convertido en fuerzas alternativas a las del gobierno, informó el gobierno del presidente Hamid Karzai.

En Afganistán hay unas 50 empresas de este tipo, 26 de las cuales son extranjeras. Emplean a 40 mil personas, tanto locales como de otros países y su principal labor es custodiar las instalaciones militares de la ISAF o escoltar transportes que se internan a zonas donde hay presencia talibán.

En otro orden, un hombre y una mujer afganos acusados de adulterio por los talibanes fueron ejecutados por lapidación en un distrito de la norteña provincia de Kunduz.

Una multitud lanzó piedras a la pareja hasta que ambos murieron, narró un testigo.

En tanto, en Irak, las pláticas para formar gobierno –casi medio año después de las elecciones parlamentarias– quedaron interrumpidas de manera indefinida, después de que la alianza Iraqiya, del ex primer ministro, Iyad Allawi, rechazó que su organización política sea sólo representativa de la minoría musulmana sunita, como dijo su rival político, el actual jefe de gobierno, Nuri Maliki. Somos un bloque laico y nacional, definió.