México salió de la parte más profunda de la recesión, aseguró este viernes Agustín Carstens Carstens, gobernador del banco central, quien destacó la solidez con la que la mayoría de países de América Latina logró transitar por los meses más difíciles de la crisis.

El Banco de México reportó que el flujo de remesas, que se contrajo como consecuencia de la crisis en Estados Unidos, repuntó en agosto, aunque en el acumulado del año todavía registró una variación negativa.

Carstens, al hablar en un foro de pequeños y medianos empresarios de América Latina, descartó que la economía mundial se encamine a una nueva recesión, una vez superada la etapa más crítica de la crisis que estalló en otoño de 2008. Sin embargo, anticipó que los países avanzados tendrán un menor crecimiento, lastrados por el crecimiento de sus déficit públicos y el disparo de la deuda gubernamental.

Las políticas de expansión del gasto público, financiado con la emisión de deuda, no están teniendo mucho efecto en la recuperación de la economía en los países avanzados, aseguró Carstens. Se agotó la posibilidad de impulsar las economías con estímulos fiscales y monetarios, afirmó.

Como una de las respuestas a la crisis de 2008, gobiernos de países avanzados, entre ellos Estados Unidos y la mayoría de la Unión Europea, aumentaron el gasto público, con lo que incurrieron en mayores déficit fiscales que fueron financiados con deuda, como parte de una estrategia para tratar de contener la caída en la actividad productiva y la pérdida de empleos.

Carstens dijo que el crecimiento de la deuda pública en los países avanzados no llevará a una doble recesión pero sí provocará que el crecimiento de las economías más desarrolladas sea realmente lento.

En su presentación en el foro, organizado por Nacional Financiera, Carstens comentó que la región de América Latina logró sortear la crisis en mejores condiciones que en episodios anteriores, por el alto precio de algunas de las materias primas que exporta la región, que permitió en los años anteriores mantener presupuestos equilibrados y un bajo nivel de deuda.

México, que tuvo la mayor caída de la actividad económica de la región en 2009, con una contracción de 6.5 por ciento, sufrió más que el resto de las naciones latinoamericanas por la concentración de sus exportaciones en Estados Unidos, que fue el epicentro de la crisis, dijo Carstens.

Otro factor, añadió, es que la parte más importante de las exportaciones mexicanas se concentra en productos manufacturados, cuyos precios no subieron tanto en los años previos, como ocurrió con las materias primas.

Sin embargo, aseguró en referencia al caso mexicano, ya salimos de la parte más profunda de la crisis y con un crecimiento acelerado y sostenido, inflación baja, sin desequilibrios financieros, monetarios o fiscales y eso da una plataforma para seguir creciendo hacia delante.

Lenta recuperación en remesas

El ingreso por remesas sumó entre enero y agosto 14 mil 441.5 millones de dólares, una disminución de 1.71 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2009, cuando sumaron 14 mil 692 millones de dólares, informó el Banco de México.

El flujo de remesas refleja las dificultades del mercado laboral en Estados Unidos y en particular el del sector de la construcción, el que emplea al mayor número de mexicanos.

En agosto, el ingreso fue de mil 946 millones, 9.32 por ciento más que en el mismo mes de 2009, añadió. Comparado con julio pasado, cuando las remesas alcanzaron mil 867 millones de dólares, las de agosto fueron superiores en 4.3 por ciento.

Primero de AL

Al anunciar la incorporación del mercado local mexicano al índice global de bonos gubernamentales a tasa fija (WGBI por sus siglas en inglés) , el secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, informó que se han obtenido flujos de capital por unos 9 mil millones de dólares de inversionistas asiáticos, los cuales ingresaron como consecuencia de la inclusión preliminar de México en este índice creado en 1986 por Citigroup.

En conferencia de prensa realizada en Palacio Nacional, y acompañado por el subsecretario José Antonio Meade, y el titular de la Unidad de Crédito Público, Gerardo Rodríguez, destacó que México es el primer país de América Latina en ingresar a este grupo en el que están incluidas las 23 economías más desarrolladas a nivel global.

El secretario de Hacienda señaló que la inclusión de México a este grupo de países es un claro reconocimiento en el ámbito internacional para México y su política responsable de finanzas públicas, y por ello reiteró la necesidad de continuar con políticas que propicien finanzas sanas y sólidas.

Cordero Arroyo aseveró: hemos sido capaces de disminuir nuestras tasas de interés de largo plazo, de fortalecer nuestras reservas internacionales, de financiar el desarrollo del país sin incurrir en sobrendeudamiento y todo esto, sin lugar a dudas, se está reconociendo en este momento.

Los países que integran el WGBI son Alemania, Australia, Austria, Bélgica, Canadá, Dinamarca, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Holanda, Irlanda, Italia, Japón, Malasia, Noruega, Polonia, Portugal, Reino Unido, Singapur, Suecia, Suiza y ahora México.