El secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, quiere reventar los acuerdos que han conseguido los 16 mil 300 trabajadores en resistencia del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) con la Secretaría de Gobernación y hace de todo para impedir que se realice el nuevo proceso de elecciones y se otorgue la toma de nota al comité ejecutivo de este sindicato, como se acordó con el gobierno federal a cambio de que se levantara la huelga de hambre.

Martín Esparza Flores, líder del gremio, planteó lo anterior poco antes de encabezar ayer un mitin frente a la embajada de Italia en México, donde los electricistas entregaron un informe en el que documentan supuestos actos de corrupción de empresas italianas en el sector eléctrico mexicano.

Ahí, el dirigente señaló que el SME sólo esta esperando que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) avale el acuerdo firmado entre este gremio y funcionarios del gobierno federal para reponer las elecciones internas, y dijo que incluso parte de la negociación incluye la liberación de fondos para la realización de este proceso.

Lozano quiere que no se resuelva el conflicto, anda en campaña contra los acuerdos que se negocian con el secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, y como sabe que su estrategia no le funcionó para desaparecer al SME y que también está perdido su candidato, Alejandro Muñoz, ya ni participa en esta mesa de negociaciones; en las últimas reuniones ni se ha presentado, dijo Esparza.

Indicó que siguen las reuniones semanales en Gobernación y, aunque lentas, sí se están obteniendo avances y hay posibilidades de alcanzar un acuerdo sobre este conflicto que se ha convertido en un problema social. Ahora se va a integrar en esta secretaría una mesa con funcionarios del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) para revisar diversos asuntos, como el de los trabajadores que estaban a punto de jubilarse y se quedaron en la indefinición, como el tema del fondo de reserva de jubilación”.

En cuanto a la reposición del proceso de elecciones, reiteró que en la misma Secretaría de Gobernación les propusieron un acuerdo que se llevaría a la JFCA para resolver este asunto mediante el marco jurídico. “Nos propusieron llevar a cabo nuevas elecciones, que se lanzara la convocatoria, establecer un día para el registro de planillas y que la misma junta entregaría la lista de los que ya se liquidaron para depurar el padrón de trabajadores que podrían votar.

Ellos mismos propusieron que las elecciones se lleven a cabo sólo con los trabajadores que no se han liquidado y con los jubilados; que se fijaran 4 días de votaciones, de 9 de la mañana a 8 de noche; 4 días más para el recuento de los votos, la intervención de un notario público para que diera fe; que hubiera observadores nacionales e internacionales y al 15 de octubre se diera en una asamblea el informe de resultados y el día siguiente, es decir el 16, la asamblea de toma de posesión, y además que en 72 horas nos entregaban la toma de nota para cumplir con el laudo de la JFCA. Todo eso está en proceso.

Además, las elecciones “se llevarían a cabo sólo en el DF y vendrían a votar aquí de todas las demás secciones, y este acuerdo ya ingresó a la junta y se espera que lo regrese a la Secretaría de Gobernación para convocar de inmediato. Con ello –dijo Martín Esparza– se permitirá demostrar que el conflicto del SME no fue por falta de democracia, sino por una estrategia de Javier Lozano porque ya preparaban el golpe armado y militar contra el SME.