La presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), María del Rocío García Gaytán, llamó a los integrantes del crimen organizado a dejar a las mujeres fuera de sus luchas: No tenemos por qué ser víctimas de venganzas. Somos las que sostenemos a las familias en este país. ¡Déjennos fuera!

Lo anterior al participar en un seminario organizado por el Poder Judicial de la Federación y el Inmujeres sobre la aplicación de los instrumentos internacionales en favor de la protección de los derechos de género, en el cual la funcionaria dio a conocer que 65 por ciento de mexicanas de 15 años o más han sido víctimas de agresiones por sus parejas, en la escuela o en su empleo.

Señaló que en los últimos 15 días el Inmujeres solicitó a las procuradurías estatales informes sobre el número de solicitudes de órdenes de protección. Únicamente son nueve, y en muchos casos se desconoce la posibilidad de dar ese apoyo, a pesar de que 31 estados tienen esa obligación legal, expresó.

Las órdenes, dijo García Gaytán, pueden ser la solución a amenazas, golpes o vejaciones, y la diferencia entre la vida y la muerte en muchos casos. Por ello llamó a las instituciones encargadas de procurar e impartir justicia a emprender un esfuerzo que se transforme en política de Estado en materia de protección a las mujeres.

Durante el seminario, en el cual participaron la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Olga Sánchez Cordero e integrantes del Consejo de la Judicatura Federal, se pronunciaron y comprometieron a construir una política integral efectiva para prevenir, atender y sancionar la violencia contra las mujeres.

Lo anterior luego de que se dio a conocer que la violencia más frecuente es entre parejas: 43.2 por ciento de mujeres mayores de 15 años han sido víctimas. De cada 100, 40 han sido maltratadas en espacios comunitarios, y de las que trabajan en fábricas, talleres o maquila 45.4 padecen agresiones laborales.

En promedio, cada día fallecen seis por situaciones intencionales, cuatro por homicidio y dos se suicidan. De los homicidios, 41.4 por ciento ocurre en sus viviendas.

Las llamadas órdenes de protección están previstas en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, y son actos de protección y urgente aplicación en función del interés de la víctima. Las autoridades deben otorgar ese beneficio en cuanto conozcan hechos probablemente constitutivos de infracciones o delitos que impliquen violencia contra las mujeres, las cuales son instrumentos intransferibles y personalísimos.

En su discurso, el consejero de la Judicatura Federal Daniel Cabeza de Vaca Hernández expresó: Se trata de un problema aún vigente con añejas raíces históricas, el que ciertamente no queremos pero que continúa lastimándonos profundamente como sociedad, pues erosiona no sólo la condición propia de la mujer, sino también de la familia y la comunidad entera.