El militar purga una sentencia de 40 años acusado de estar al servicio de El señor de los cielos
Lunes 8 de noviembre de 2010, p. 13
El segundo tribunal unitario penal de la ciudad de México cerró este fin de semana en definitiva cualquier posibilidad de que el general Jesús Gutiérrez Rebollo pueda cumplir en su casa la condena de 40 años a que fue sentenciado por proteger al cártel de Juárez, revelaron fuentes del Poder Judicial Federal.
El militar deberá permanecer recluido en el penal federal conocido como El Rincón, ubicado en Nayarit.
De acuerdo con las fuentes consultadas, el magistrado Ricardo Paredes ratificó una resolución emitida a principios de este año por una juez de distrito, quien dijo que dicho beneficio sólo puede otorgarse a los mayores de 70 años sujetos a un juicio, no a quienes compurgan sentencia definitiva.
El magistrado también confirmó que el ex titular del desaparecido Instituto Nacional de Combate a las Drogas no acreditó el requisito de senilidad que le hubiera permitido pasar en casa el resto de su condena.
Gutiérrez Rebollo está encarcelado desde principios de 1997, luego de ser acusado de proteger las operaciones del capo Amado Carrillo Fuentes, El señor de los cielos, ya fallecido.
Recientemente al militar le colocaron un marcapasos, además de que es diabético. Sin embargo, el magistrado Paredes valoró dictámenes en los que se destaca que conserva una memoria lúcida y un coeficiente intelectual superior al término medio.
Gutiérrez Rebollo fue sentenciado a 40 años de prisión por delitos contra la salud y delincuencia organizada, y a 31 años, 10 meses y 15 días por acopio y transportación de armas de uso exclusivo del Ejército. Ambos castigos se purgan de manera simultánea.
En abril de 2008, un tribunal colegiado de circuito restituyó en su grado al general de división Jesús Gutiérrez Rebollo, y en lo que fue el último recurso de defensa a que tenía derecho, el primer tribunal colegiado penal de la ciudad de México le concedió un amparo directo.
Además de que el amparo le permitirá conservar su grado de general durante el tiempo que cumpla su sentencia, también se le sustituyó una multa superior a mil días de salario mínimo por jornadas de trabajo en favor de la comunidad.